Grupo yihadista reivindica ataque contra la ONU en el norte de Malí
AFP
El grupo yihadista malí, Ansar Dine, reivindicó el viernes en un comunicado difundido por la agencia de prensa mauritana Al Akhbar el ataque contra Naciones Unidas en Kidal, en el noreste de Malí.
El grupo dirigido por el ex jefe rebelde tuareg, Iyad Ag Ghaly, convertido en yihadista, afirmó haber hecho "explotar su vehículo cargado de explosivos en la base llamada Kandi, en el centro de Kidal, sede de los franceses y de la Minusma [la misión de la ONU en Malí]" y haber dejado "decenas de muertos" en esta operación.
Seis cascos azules guineanos y tres soldados malienses murieron en dos ataques.
Un sexto Casco azul guineano falleció como consecuencia de las heridas recibidas en un ataque combinado perpetrado en esta jornada, temprano por la mañana, contra el campamento de la Misión de la ONU en Malí (MINUSMA), en Kidal (noreste).
Balances anteriores mencionaban primero dos muertos y luego cuatro y cinco, así como la treintena de heridos, de los cuales varios se encuentran en estado grave.
Estos ataques "no debilitarán la determinación de Naciones Unidas en apoyar al gobierno maliense, las partes signatarias del acuerdo de paz y del pueblomalí en sus esfuerzos para alcanzar una paz y estabilidad duraderas", según una declaración del portavoz del secretario general de la ONU Ban Ki-moon, en referencia al acuerdo firmado en mayo-junio de 2015 por el gobierno y la ex rebelión predominantemente tuareg.
Disparos de cohetes precedieron a la explosión de un "vehículo con kamikazes a bordo" en el interior del campamento, según un responsable del contingente guineano atacado.
"El vehículo penetró en el campamento entre dos disparos de cohetes", precisó este responsable.
El jefe de la MINUSMA, Mahamat Saleh Anadif, denunció un "acto odioso e irresponsable", que "traduce la locura del campo de los enemigos de la paz" enMalí, subrayando que el ataque tuvo lugar 48 horas después de su estadía en Kidal, durante su primera visita en el terreno.
Paralelamente, tres soldados malienses perecieron y otros dos resultaron heridos en una emboscada en la región de Tombuctú (noreste).
Este ataque se produjo una semana después de otro reivindicado por Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) contra una base de policías nigerianos de la Minusma instalado en un antiguo hotel de la ciudad, en el que murieron un militar malí y al menos cuatro asaltantes, según las autoridades malienses