Grecia busca una nueva ayuda europea tras entrar en default con el FMI
AFP
a Eurozona examinará este miércoles las nuevas propuestas de Atenas para obtener una ayuda financiera y evitar un 'Grexit', después de que el país entrara en default con el Fondo Monetario Internacional.
Grecia se hundió aún más en la crisis al no realizar el pago de 1.500 millones de euros (casi 1.700 millones de dólares) al FMI, antes de que expirara el plazo este martes.
"Confirmo que el pago (...) debido hoy al FMI por parte de Grecia no ha sido recibido", dijo el portavoz del Fondo, Gerry Rice.
La consecuencia inmediata es que Atenas queda privada de acceso a los recursos financieros del FMI hasta que no haya pagado su deuda con la institución, que a su vez asiste al mayor default de su historia.
Paralelamente, el paquete europeo de ayuda a Grecia venció a las 22H00 GMT, lo que priva al país heleno de una ayuda de 16.000 millones de euros.
Privada de nueva financiación por parte del FMI, la Unión Europea y el Banco Central Europeo (BCE), Atenas sólo puede contar ahora con la ayuda de urgencia de este último a sus bancos.
Las consecuencias son difíciles de calibrar, pero el presidente estadounidense, Barack Obama, advirtió de que esta crisis puede tener un "impacto significativo" en el crecimiento de Europa y "disminuir" la expansión económica mundial.
Los mercados asiáticos reaccionaron sin sobresaltos y cerraron en su mayoría al alza el miércoles. Sin embargo, el petróleo continuaba bajando en Asia.
Pese a que Grecia había anticipado el martes que no pagaría al FMI, al que acusa de "comportamiento criminal" por las curas de austeridad impuestas a los griegos, en el último minuto pidió una prórroga hasta noviembre para devolver su préstamo.
El consejo de administración del FMI empezó a examinar la demanda, pero no decidirá hasta más adelante si la acepta o la rechaza.
"Es una triste página de un triste capítulo. El FMI arriesgó mucho con este plan de ayuda", dijo a la AFP el representante brasileño ante la institución, Paulo Nogueria Batista, expresando su opinión personal.
De forma inesperada, Grecia presentó el martes nuevas propuestas a sus acreedores europeos, tras la ruptura de negociaciones el sábado pasado en Bruselas y ante la inminencia del referéndum convocado por Atenas para que los griegos decidan si aceptan las condiciones de las instituciones.
Concretamente, el gobierno propuso un acuerdo con el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera, el fondo permanente de rescate de la Eurozona, con el fin de cubrir sus necesidades financieras, estimadas en 30.000 millones de euros en los próximos dos años, así como una reestructuración de su deuda.
Grecia incluso sugirió que podría suspender la organización del referéndum si se reanudan las negociaciones con la UE, indicó una fuente europea.
Esta propuesta de un tercer plan de ayuda a través del Mecanismo Europeo será estudiada "según los procedimientos habituales", dijo el ministro finlandés de Finanzas, Alex Stubb, tras una conferencia telefónica del Eurogrupo, que volverá a reunirse este miércoles.
Previamente, la canciller alemana Angela Merkel advirtió que su país no negociaría con Atenas una nueva ayuda antes del referéndum del domingo.
Merkel y su ministro de Finanzas, Wolfang Schäuble, intervendrán este miércoles ante el Bundestag (parlamento alemán) durante un debate sobre Grecia.
Otra cita crucial tendrá lugar este miércoles: los 25 miembros del consejo de gobernadores del BCE se reunirán para abordar la situación del sistema bancario griego.
El ente emisor deberá decidir si mantiene los préstamos de urgencia a los bancos griegos, fragilizados por las retiradas masivas de los griegos, inquietos sobre el futuro financiero de su país.
Técnicamente, el BCE podría cerrar el grifo financiero, aunque parece poco probable. En Grecia, el gobierno decidió cerrar los bancos hasta el día después del referéndum del domingo para evitar la fuga de capitales. Durante este periodo, los griegos sólo pueden retirar un máximo de 60 euros diarios en los cajeros.