AFP
El gobierno brasileño negó este jueves airadamente que la presidenta Dilma Rousseff haya interferido en el megaescándalo de corrupción en Petrobras, tras filtrarse presuntas revelaciones de un senador de su partido que cayeron como una bomba en Brasilia.
El abogado general del Estado, José Eduardo Cardozo, sostuvo que una "posible delación premiada" del senador oficialista Delcidio Amaral acusando a Rousseff de interferir con la investigación y al expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) de estar al tanto de la trama de corrupción en Petrobras es "un conjunto de mentiras".
"Si hay una supuesta delación, tenemos un conjunto de mentiras (...) He dicho reiteradamente que una delación premiada puede decir una verdad, una verdad selectivamente, o puede ser solo mentiras", dijo Cardozo a periodistas en Brasilia.
Y estas son declaraciones "sin pruebas, sin absolutamente nada que las refrende", añadió.
"El gobierno Dilma no intervino en el Lava Jato, no intervino en la policía federal", añadió Cardozo en referencia a la operación policial que investiga el megaescándalo de sobornos en Petrobras a cambio de contratos.
El jefe de gabinete de Rousseff, Jacques Wagner, dijo que la presidenta recibió la noticia "con indignación" y que quedó "preocupada".
La revista IstoÉ informo el jueves que Delcidio Amaral, que era el líder del gobernante PT en el Senado hasta que fue acusado de obstruir la investigación, firmó un acuerdo de colaboración con la fiscalía a cambio de una reducción de su pena.
Amaral fue encarcelado el año pasado, pasó casi 90 días detenido y desde mediados de febrero responde a su proceso en libertad.
Pero el senador emitió este jueves un comunicado en el que no confirma las declaraciones que le fueron atribuidas por IstoÉ.
"Ni el senador Delcidio ni su defensa confirman el contenido del artículo (...) No conocemos el origen, tampoco reconocemos la autenticidad de los documentos que van adjuntados al texto", dijo el comunicado.
Poco antes, la propia Rousseff sostuvo que su gobierno "continuará defendiendo que la presunción de inocencia no puede ser sustituida por el presupuesto de culpa, ni tampoco dar lugar a una execración pública sin acusación formal y a condena sin proceso por medio de filtraciones ilegales y selectivas", aunque sin hacer referencia directa a Amaral.
"Quiero otra vez enfatizar que el combate a la corrupción sigue siendo una prioridad de mi gobierno. Ningún gobierno tuvo un enfrentamiento tan duro y eficiente contra la corrupción como el mío. Y continuará siendo así", añadió.
La fiscalía de la República dijo a la AFP que no existía un acuerdo de delación con Amaral, aunque éstos solo se hacen públicos una vez homologados por la Corte Suprema.
Amaral está temporariamente apartado del PT, que no lo defendió cuando fue arrestado y que analiza su caso en vistas de una eventual expulsión.