“Estamos mandando a fuerzas élite para apoyar la lucha contra el contrabando. La unidad F10, que es especializada en acciones de control de este tipo de situaciones con alto grado de especialidad y compuesta por oficiales y suboficiales, ya está en la zona y se va a incrementar", describió Reymi Ferreira, ministro de Defensa boliviano, la estrategia militar fronteriza para detener la actividad de contrabando en la zona.
La acción del gobierno boliviano viene en respuesta a lo sucedido en marzo, cuando funcionarios policiales de la comuna de Colchane detuvo a nueve militares tras ser sorprendidos incautando un camión en suelo nacional.
"Ya está de buen tamaño de que gente amedrente, rodee, golpee y agreda a gente que está cumpliendo con su deber que es combatir el delito”, se excusó el ministro frente a lo sucedido con los ciudadanos bolivianos arrestados.
El grupo de Elite de las Fuerzas Armadas de Bolivia
Según medios bolivianos, este grupo armado, llamado como la Compañía Conjunta de Fuerza Antiterrorismo y Antisubversión F10 tiene en sus filas a militares del Ejército, Fuerza Áerea y de la Armada, entrenados y capacitados para cumplir con misiones de alto riesgo.
Corresponde a una sección de la defensa boliviana que está encargada de la seguridad de grandes eventos.