Gobierno de Bolivia no sabe qué hacer con museo de Evo Morales
El gobierno transitorio de Bolivia aún no sabe qué hará con un museo dedicado al expresidente Evo Morales y que costó más de siete millones de dólares, aunque el canal de decisión podría ser un referéndum, aseguró este martes la ministra interina de Culturas, Martha Yujra.
"Primeramente vamos a consultar al pueblo boliviano, lo que decida el pueblo boliviano haremos", aseguró la ministra en una apresurada declaración a los medios en La Paz.
Consultada sobre la forma en que se hará dicha consulta, Yujra respondió que podría ser mediante un "referéndum", ya que esa infraestructura en la pequeña Orinoca, en el altiplano del país, "no tiene ningún beneficio" y hace perder "bastante dinero".
Con el nombre de "Museo de la Revolución Democrática y Cultural-Orinoca", el espacio compuesto por tres módulos y espacios abiertos sobre unos 10.814 metros cuadrados rinde homenaje a distintas facetas de la vida de Morales y del proceso político que presidió por casi 14 años.
Inaugurado a principios de 2017, el museo costó unos 7,1 millones de dólares y según las autoridades en aquel momento era uno de los más grandes de la región. Al lado está la casa que Morales habitó en su infancia, una pequeña choza hecha de bloques de adobe y techo de paja.
Idolatría y regalos
Tanto la dimensión de la obra como el costo fueron objeto de críticas de sus detractores, por considerar al museo un culto a la personalidad, aunque el gobierno argumentó que se trataba de un espacio dedicado al pueblo y a los humildes.
Entre las piezas que distinguen el museo están las decenas de regalos que Morales recibió en distintos viajes tanto dentro como fuera del país, además de algunos sectores en los que se muestra información, imágenes, cerámica y esculturas precolombinas.
También se incluyen esculturas del exmandatario, galerías de fotos, retratos en blanco y negro de sus años en el colegio, su servicio militar, la época de dirigente sindical en marchas y ruedas de prensa, así como ponchos, sombreros y gorros con motivos andinos.
Otros símbolos personales que destacan son la trompeta dorada que rememora los años en los que fue músico de una comparsa folclórica o el suéter que lo caracterizó cuando fue electo mandatario de Bolivia en 2005.
Áñez con respaldo de EE.UU.
En tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró en Twitter su respaldo a la presidenta provisional Jeanine Áñez, quien asumió con miras a organizar nuevos comicios tras la renuncia de Morales, en medio de protestas por los resultados de las elecciones del pasado 20 de octubre. Áñez agradeció el apoyo, en la misma red social.
"Apoyamos a @JeanineAnez en Bolivia mientras trabaja para garantizar una transición democrática pacífica a través de elecciones libres", tuiteó Trump sobre la exsenadora derechista. "Denunciamos la violencia en curso y los que la provocan tanto en Bolivia como desde lejos. ¡Estados Unidos apoya a la gente de la región por la paz y la democracia!", añadió.
Evo Morales se asiló en México y el 12 de diciembre se trasladó a Argentina, donde el flamante gobierno del peronista Alberto Fernández le concedió status de refugiado. Ahi se anunció que Morales será jefe de campaña del ahora opositor Movimiento al Socialismo (MAS).
El Congreso boliviano se dispone a designar un nuevo Tribunal Electoral esta semana, que deberá luego convocar elecciones generales.