El desmantelamiento completo del campamento conocido como la "jungla de Calais", donde miles de inmigrantes malviven a la espera de poder llegar de forma clandestina al Reino Unido, comenzará el próximo lunes por la mañana, anunció hoy la Prefectura de Pas de Calais, en el norte de Francia.
Los migrantes serán trasladados en autobuses hasta centros de acogida en todo el país. "Tenemos claro lo delicada que es esta operación", afirmó el Ministerio de Interior. El diario Le Figaro precisó en su página web que 60 autobuses se ocuparán el primer día del traslado de parte de los 6.486 inmigrantes censados, entre los que hay 1.291 menores. Los días siguientes se recurrirá a 45 autocares diarios, cifra que irá disminuyendo a medida que descienda el número de personas instaladas en el campamento.
"Trato inhumano y degradante"
La operación, según la cadena BFM TV, está previsto que dure cerca de una semana y movilizará a unos 1.250 policías y gendarmes. El Tribunal Administrativo de Lille (norte de Francia) validó el pasado 18 de octubre el desmantelamiento de ese campamento, contra el que once asociaciones habían presentado un recurso para intentar paralizarlo. La corte entendió que su desmantelamiento busca poner fin al "trato inhumano y degradante" de los inmigrantes, que las ONG temen que se produzca cuando se inicie la evacuación.
Esfuerzos "de última hora”
La organización Human Rights Watch (HRW) alertó hoy de que las autoridades francesas y las británicas no tienen un plan creíble para reubicar al millar de menores sin compañía que malviven en ese campamento. A su juicio, ambos gobiernos están haciendo esfuerzos "de última hora para encontrar una solución para estos niños sin la compañía de adultos, pero estos pasos son pequeños y llegan demasiado tarde", y la "jungla" no debería cerrarse "hasta que los derechos de los menores estén garantizados".