Apenas los relojes en Francia marcaron las 22:00 hora local, se levantó el veto a los medios de comunicación de mantener en silencio las estimaciones del balotaje. Inmediatamente se publicó lo que ya todos esperaban: la victoria del centrista Emmanuel Macron en la segunda vuelta presidencial y la derrota de la ultra derechista Marine Le Pen.
El resultado final, un 66.01% de las preferencias a Macron, un joven de 39, ex ministro de Economía de Hollande, con escasa experiencia política. Unos 32 puntos más abajo se ubicaba Le Pen, con solo el 33.09% de los votos.
En ese momento, los Campos Elíseos, la avenida más famosa del mundo, estalló en júbilo y se convirtió en una fiesta. Los conductores hacían sonar sus bocinas y la bandera tricolor se tomó cada rincón.
El desafío de los líderes europeos que emanan de partidos o movimientos más moderados será el de frenar los discursos nacionalistas y extremista en los próximos años.
Emocionado, e incluso impresionado, Macron se dirigió a sus seguidores que desde hace horas antes lo esperaban en la explanada del Louvre.
"Soy consciente de la ira, ansiedad y duda de los franceses", señaló Macron en su primera declaración como presidente electo de Francia.
Su programa nació como una candidatura casi testimonial, pero que dejaba en claro dentro de sus propuestas que era una respuesta a la política populista impulsada por Le Pen y el Frente Nacional: el centrista promete estrechar los lazos con la Unión Europea y poner a Francia en la primera línea de la lucha contra el terrorismo.
"Sí" a la Unión Europea
Luego del triunfo del Brexit en Reino Unido y de la victoria de Donald Trump de Estados Unidos, muchos temían una eventual llegada de Le Pen al Elíseo: con su fuerte política antiinmigratoria, su deseo de salirse de la zona euro para retomar el franco e incluso abandonar la Unión Europea.
Sin embargo la respuesta de los franceses fue drástica: el arrollador triunfo de Macron fue el equivalente a un "SÍ" en el referendum sobre la permanencia de Francia en el bloque europeo.
El cientista político de la Universidad de París IV París-Sorbonne, Pierre Lebret, señaló a T13.cl que esa consolidación de la extrema derecha francesa, que logró su mayor adhesión en estas elecciones, viene de la mano con una "cierta normalización del Frente Nacional", lo que es "un peligro para Francia y Europa".
"El desafío de los líderes europeos que emanan de partidos o movimientos más moderados será el de frenar los discursos nacionalistas y extremista en los próximos años. Por su puesto, más aun en el contexto europeo y global actual, que hay que poner atención muy de cerca al empuje nacionalista en Europa, pero también entender sus causas y tratar de mitigarlas, y tratar de construir un proyecto en Francia pero también en Europa con el que el conjunto de la ciudadanía se pueda sentir parte", agregó el cientista político.
Pero en medio del éxito del populismo, Francia optó por el camino del liberalismo y europeísmo. Y ahora el país de la "liberté, égalité, fraternité" tendrá al presidente más joven que ha visto su historia.
El desafío de Macron
"Se ha escrito una nueva página en nuestra historia esta tarde. Quiero ser una página de esperanza y refundar la confianza", señaló Macron este domingo después de que se conocieran los resultados.
Sin embargo, para poner ¡En Marcha! (el nombre de su partido político) su programa, Macron tiene una serie de desafíos que no vienen de la mano con ganar las elecciones presidenciales.
Los primeros pasos de Macron y el gobierno que nombrará para liderar la campaña legislativa serán decisivos.
El próximo paso de Macron está a pocas semanas, en las próximas elecciones legislativas del 11 y 18 de junio. Allí deberá conseguir una mayoría parlamentaria (en este momento tiene 0 escaños), en medio del avance de la extrema derecha, que pese a todo, logró pasar a segunda vuelta.
Lebret señala que la alta votación que obtuvo Macron en este balotaje debería permitirle "generar una dinámica a su favor para lograr una mayoría parlamentaria".
"Los franceses aspiraran hoy día a lograr una cierta estabilidad y darle una gobernabilidad al nuevo mandatario. La pregunta es cuán amplia será esa mayoría. Los primeros pasos de Macron y el gobierno que nombrará para liderar la campaña legislativa serán decisivos", agregó el cientista político.
El futuro del Frente Nacional
La primera vez que el partido de ultraderecha, Frente Nacional, logró pasar al balotaje fue en 2002, cuando se enfrentó el padre de Marine, Jean-Marie Le Pen, contra Jacques Chirac. En esa ocasión Le Pen apenas alcanzó el 17,9% de los votos, contra un aplastante 82,1% de Chirac.
Ahora, pese a haber estado lejos de la victoria, el 34,9% obtenido por Le Pen en el balotaje es el mayor porcentaje de apoyo que ha obtenido un candidato de ese partido, lo que solo habla de la consolidación que está logrando la ultra derecha entre los franceses.
La candidata del FN aplaudió el resultado "histórico y masivo" obtenido por su partido en el balotaje a la vez que anunció una "transformación profunda". De hecho, el número dos del partido Florian Philippot, indicó que la formación "se transformará en una nueva fuerza política, que, por definición, no tendrá el mismo nombre".
Al aceptar su derrota, Marine Le Pen ya anunció a sus seguidores que estará "al frente del combate" de las elecciones legislativas de junio.