Durante la tarde de este domingo, el volcán de Fuego de Guatemala, ubicado a 50 kilómetros al oeste de la capital de dicho país, inició un nuevo pulso eruptivo, siendo el segundo más fuerte en lo que va del año.
La erupción provocó una columna de cenizas que se ha extendido por más de 11 kilómetros por sobre el nivel del mar.
Por lo anterior, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), señaló que flujos piroplásticos se dirigen hacia las barrancas Seca o Santa Teresa y posiblemente a Cenizas, los cuales pueden ser mortales para la población.
Además, señalaron que las nubes de cenizas se dirigen a la aldea Sangre de Cristo y al municipio de San Pedro Yepocapa.
Por lo mismo, al menos 300 personas fueron evacuadas preventivamente por las autoridades, con tal de evitar cualquier incidente. Además, la erupción obligó el cierre del aeropuerto de la ciudad de Guatemala.
Además, la Coordinadora Nacional para la reducción de desastres (Conred) recomendó a la población que vive cercano al volcán, usar mascarillas y cubrir alimentos o recipientes de agua, con tal de evitar su contaminación.
Esta es la segunda erupción del volcán en 2018. La primera ocurrió el pasado 1 de febrero, cuando el coloso estuvo 20 horas activo, mientras provocaba expulsiones de lava, temblores y explosiones.