Las valoraciones que distintas instituciones y especialistas hacen de la orden ejecutiva firmada por Donald Trump para que las familias migrantes detenidas en la frontera sur de Estados Unidos no sean separadas son contradictorias.
Aunque países como México o Guatemala saludan la medida, muchos dudan de que vaya a ser realmente efectiva. Algunos analistas la consideraban, incluso, "ilegal".
"Sí, es legal, es claramente legal", dijo un consejero de la Fiscalía General, Gene Hamilton, en una conferencia telefónica con la prensa. "El presidente ha tomado una decisión audaz, pero solo el Congreso puede abordar este problema, le pedimos que actúe rápidamente", subrayó.
El asesor explicó que estas medidas están destinadas a ganar tiempo hasta que el Congreso adopte una resolución: "El Congreso tiene que actuar, puede arreglar esta situación mañana", avisó, refiriéndose a las dos iniciativas sobre inmigración que está previsto que sean votadas mañana en la Cámara Baja.
La orden ejecutiva de Trump puede violar el acuerdo Flores de 1997, al que llegó el Gobierno del entonces presidente, Bill Clinton, con dos organizaciones humanitarias.
Este acuerdo establece que los menores no acompañados detenidos en la frontera solo pueden ser privados de libertad durante 20 días.
Kenneth Wolfe, portavoz de la Administración para Niños y Familia del departamento estadounidense de Salud y Servicios Sociales (HHS por sus siglas en inglés), explicó que los más de 2.300 niños separados de sus familias no podrían reunirse con ellas inmediatamente.
Los niños separados de sus familias son entregados al HHS en 72 horas, catalogados como menores no acompañados y entregados eventualmente a parientes. Los funcionarios dijeron que ya están trabajando para volver a reunir a las familias lo más pronto posible, pero no saben exactamente ni cómo ni cuándo.
Wolfe explicó también que su departamento está pagando hasta 775 dólares al día por niño para su alojamiento, pero que los que están en las tiendas permanentes suponen sólo 256 dólares al día. El organismo se encarga actualmente de 11.800 inmigrantes menores de edad, de los que cuatro quintas partes llegaron sin acompañamiento paterno. Incluso el Pentágono se ha ofrecido a ayudar prestando alojamiento en sus bases para los inmigrantes irregulares si lo requiere el Departamento de Seguridad.
Los servicios secretos estadounidenses investigan como una amenaza contra el presidente un tuit del actor Peter Fonda (famoso por su papel en la película 'Easy Rider') en el que decía: "Deberíamos arrancar a Barron Trump de los brazos de su madre y meterlo en una jaula con pedófilos".
Stephanie Grisham, portavoz de la primera dama, dijo que el tuit "era nauseabundo e irresponsable" y que la agencia "ha sido notificada". Peter, hijo de Henry Fonda, canceló las entrevistas que tenía previstas por el estreno de la película 'Boundaries' aduciendo una "indisposición".