Ex policía argentino sospechoso de desapariciones, será extraditado el domingo
El ex policía argentino, Mario Sandoval será extraditado el domingo por la noche hacia Argentina, que espera juzgarlo como sospechoso en la desaparición de un estudiante en 1976, informaron a la AFP fuentes cercanas al caso y del aeropuerto.
Tras ocho años de procedimiento judicial y el agotamiento de sus últimos recursos esta semana, Mario Sandoval debe ser enviado el domingo por la noche en un vuelo Air France de Paris a Buenos Aires.
Exiliado desde 1985 en Francia, donde obtuvo la nacionalidad, Sandoval fue detenido el miércoles en su residencia de Nogent-sur-Marne, cerca de París.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) había rechazado el viernes el pedido de suspensión de la extradición de Sandoval.
Este pedido, formulado siguiendo un procedimiento de urgencia, fue declarado improcedente por la juez de turno del TEDH, precisaron las mismas fuentes.
Su extradición "es definitiva y se realizará en un plazo máximo de siete días", había añadido el ministerio, poco después de que el Consejo de Estado, la máxima jurisdicción administrativa francesa, diera luz verde a su extradición tras una batalla judicial de ocho años.
El TEDH explicó que Sandoval recurrió a esta corte invocando el riesgo de sufrir "malas condiciones de detención" o "torturas".
Sandoval también argumentó que respaldar "el proceso penal [contra él] en Argentina constituiría una negación flagrante de justicia".
El gobierno francés había dado luz verde a su extradición el año pasado, pero el ex policía, que niega las acusaciones y estima que de todas formas hay prescripción, había apelado al Consejo de Estado, última instancia administrativa en Francia.
La petición de extradición, presentada por Argentina en 2012, ya fue aprobada anteriormente por el Tribunal de apelación de París, y luego por el Tribunal de Casación francés, equivalente al Tribunal Supremo.
La ley impide extraditar a una persona cuando el crimen prescribió, pero la justicia francesa consideró que al no haber reaparecido la víctima, el delito se considera "continuo".
Estudiante de arquitectura, Hernan Abriata fue detenido en la Escuela de mecánica de la marina (ESMA), un centro de tortura de la dictatura argentina (1976-1983) por el que pasaron unas 5.000 personas que luego desaparecieron, a veces lanzadas desde aviones al Río de la Plata.