"Sentimos indignación por el juicio político. Esta batalla la ganará el pueblo. La verdad se impondrá siempre".
Con estas palabras, el Presidente de Bolivia, Evo Morales, envió un mensaje de "fuerza" a su par brasileña, Dilma Rousseff, luego que este domingo la Cámara de Diputados de Brasil aprobara por 367 votos (de un total de 513 miembros) el impeachment o juicio político en su contra, luego que fuera acusada de violar la ley de responsabilidad fiscal, por un presunto "maquillaje" del déficit presupuestal al usar fondos de bancos públicos para financiar programas de gobierno.
Previo a la votación, el mandatario bolivano había señalado en su recién estrenada cuenta de Twitter:
Tras la aprobación en la Cámara, el pedido de juicio político pasará al Senado, que de dar la mayoría simple obligará a Rousseff a apartarse del cargo por hasta 180 días, mientras sea juzgada. En ese caso, el vicepresidente Michel Temer pasaría a ocupar la presidencia de forma interina y quizá hasta el fin del mandato en 2018 si Rousseff fuera destituida.
Rousseff rechaza la acusación, acusando una conspiración en su contra.