Tras varias semanas de intenso debate interno, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió abandonar el Acuerdo de París, debilitando con esto los esfuerzos internacionales por combatir el cambio climático con la retirada del pacto del segundo mayor emisor de gases contaminante.
Con esta decisión, el mandatario estadounidense cumple una de sus promesas de campañas más polémicas, justificada bajo los argumentos más conservadores que aseguran que este pacto afecta a la economía de Estados Unidos.
"En este tema y muchos más he mantenido mi promesa y no quiero que nadie se ponga en nuestro camino. Lucho todos los días por el gran pueblo de este país. Y para cumplir mi deber solmene de proteger a este país, EE.UU. se retirará del Acuerdo climático de París", anunció Trump en su discurso desde la Casa Blanca.
"El acuerdo de París es el ejemplo de Washington entrando en un acuerdo que pone en desventaja al pueblo estadounidense", dijo.
Este acuerdo es menos sobre la protección del clima y más sobre la ventaja que lograrían otros países a cuesta de Estados Unidos
"Los contribuyentes habrían absorbido las desventajas, fabricas cerradas, producción económica disminuida. Desde hoy, Estados Unidos dejará toda implementación del Acuerdo de París y las desventajas y esfuerzos financiero que esto incluye", enfatizó.
"Este acuerdo es menos sobre la protección del clima y más sobre la ventaja que lograrían otros países a cuesta de Estados Unidos", agregó.
Eso sí, el mandatario estadounidense dijo estar dispuesto a negociar un nuevo acuerdo climático: "Comenzaremos negociaciones para entrar a un acuerdo o una transacción completamente nueva en términos justos para Estados Unidos, sus empresas, sus trabajadores, sus contribuyentes".
Poco después del anuncio, el ex presidente Barack Obama señaló que con esta decisión Donald Trump "rechaza el futuro".