Miles de correos de líderes demócratas de Estados Unidos, personas e instituciones fueron revelados en los últimos meses por masivos hackeos divulgados en sitios como Wikileaks y DCLeaks, en una acción en la que que Washington culpa a Rusia.
El departamento de seguridad del Estado y el Servicio de Inteligencia estadounidense emitieron una declaración conjunta en la que dicen tener la "confianza que el gobierno ruso dirigió las recientes vulneraciones a e-mails de personas e intituciones estadounidenses".
"Estos robos y revelaciones tienen la intención de interferir con el proceso de elecciones en Estados Unidos", acusan.
Asimismo, los servicios aseguran que la orden de realizar estas acciones habría venido de altos mandos de Rusia, pues sería consistente con métodos, que según Estados Unidos, han sido utilizados con anterioridad por Moscú.