El Partido Socialista (PSOE) español celebra hoy un cónclave clave para despejar su futuro en medio de una crisis sin precedentes en la formación centenaria, dividida por la postura a adoptar ante el bloqueo político que vive España tras más de nueve meses sin Gobierno.
Los casi 300 miembros del Comité Federal del PSOE tendrán que elegir hoy entre permitir gobernar en el país al conservador Mariano Rajoy, quien ganó los comicios generales de junio sin mayoría absoluta, y liderar un Gobierno alternativo con otras fuerzas, como pide el líder socialista, Pedro Sánchez.
Una parte del PSOE, encabezada por dirigentes regionales críticos a Sánchez, reclama que una comisión política o gestora se ponga al frente del partido al considerar disuelta su dirección tras la dimisión esta semana de más de la mitad de sus miembros, con el objetivo fallido de forzar la retirada del líder socialista.
Los leales a Sánchez siguen reconociendo a su líder como tal y defienden unas elecciones internas inmediatas para que sea la militancia la que elija al secretario general y, en última instancia, la postura a adoptar sobre el Gobierno de España. La tensión es evidente en el partido, en el que no se vislumbra posibilidad de acuerdo entre ambas facciones.
En el interior de la sede nacional del PSOE, en Madrid, los afines a Sánchez y sus detractores ni siquiera lograban ponerse de acuerdo sobre cuestiones formales como el orden del día. (dpa)