El poderoso huracán Iota causa estragos en el Caribe norte de Nicaragua
El huracán de categoría 5, Iota, con vientos de 260 kilómetros por hora (160 m/h), comenzó este lunes a causar estragos en la Región Autónoma del Caribe Norte (RACN) de Nicaragua, en donde se reportan vientos devastadores y lluvias torrenciales.
Iota es el huracán más potente que se registra en la historia de Nicaragua, dijo en comparecencia de prensa el director de Meteorología del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), Marcio Baca, tras confirmar que las paredes del ojo del ciclón golpean Nicaragua.
"Este potente huracán Iota ya está prácticamente (sobre Nicaragua), la parte delantera o la parte izquierda del centro de la tormenta ya está en tierra", explicó.
1 millón 785 mil personas serán afectadas por el #HuracánIota en comunidades de la Costa Caribe Norte de Nicaragua, según SINAPRED.
— UNICEF Nicaragua (@UNICEFNicaragua) November 17, 2020
UNICEF está trabajando para brindar apoya a las 👨👩👧👦, en especial a 👧👦 y adolescentes que suelen ser los más afectados. #Iota pic.twitter.com/PjmV0cKEka
El funcionario dijo que el ojo del huracán está tocando el límite de la costa de la comunidad indígena de Haulover, al sur de Bilwi, cabecera municipal del Caribe norte, que es la región más pobre, vulnerable y olvidada de Nicaragua.
Poco después, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que el ojo poderoso ciclón Iota toco tierra como huracán de categoría 4 -de un máximo de 5- la noche de este lunes cerca de Haulover, en la costa caribeña de Nicaragua, con vientos máximos sostenidos de hasta 250 kilómetros por hora.
1045 PM EST Update: Extremely dangerous Hurricane #Iota makes landfall along the coast of northeastern Honduras. More info: https://t.co/tW4KeFW0gB pic.twitter.com/mJ4nQ2GmLy
— National Hurricane Center (@NHC_Atlantic) November 17, 2020
El más potente que llega a Nicaragua
Iota "se encuentra ya tocando el límite, la costa de Halouver, que es el sitio en donde impactó el centro de este potente huracán con una velocidad máxima de vientos de 260 kilómetros por hora", precisó. "Esto lo convierte, desde ya, en el huracán más potente que ha tocado tierra nicaragüense desde que tenemos registros de ciclones tropicales", sostuvo.
El anterior fue el "Joan" que azotó Nicaragua en octubre de1988 también en categoría 5, dijo.
Miles de evacuados
Por su lado, el codirector del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred) de Nicaragua, Guillermo González, dijo que lograron evacuar a más de 40.000 personas de la zona del impacto del huracán en 250 albergues. Miles se refugiaron en casas de familiares o amigos, aunque no los cuantificó.
En Bilwi se reportan cortes del fluido eléctrico, inundaciones en calles, desprendimiento de techos de viviendas, y caída de árboles. "Se está despegando el zinc de (el techo de) mi casa a pesar de que lo reparamos (después de) el Eta", dijo a la AFP Silvania Zamora, una habitante de Bilwi, capital de la RACN, que buscó refugio en la casa de su vecino.
“Yo vi pasar a una señora de edad corriendo y gritando por auxilio, al parecer había perdido su casa. Se abrazó con todas sus fuerzas a un árbol de coco y aguantó ahí, hasta que dos hombres con cuerdas amarradas a la cintura la rescataron”, contó a The Associated Press Jason Bermúdez, de 26 años, vecino del barrio Filemón Rivera, de Bilwi.
Bermúdez, estudiante universitario que sobrevivió al ciclón Eta hace solo 13 días, se resguardó en su casa junto las seis personas de su familia y otras ocho a quienes dieron refugio desde ayer.
"Es mucho peor" que Eta
Aseguró que “definitivamente este huracán es mucho peor” que Eta, que dejó pérdidas de 170 millones de dólares y causó daños a 1.800 viviendas en el caribe norte de Nicaragua según el gobierno.
“Ahora apenas son las ocho de la noche y las lluvias son muy fuertes, ya hay bastantes casas sin techo, cercos y árboles frutales caídos. Nunca olvidaremos este año”, señaló con tristeza.
Se prevé que el "catastrófico" huracán genere grandes acumulaciones de lluvias, con el consecuente peligro de graves inundaciones repentinas, desbordes de ríos y deslizamientos de tierra.
En ese sentido, los meteorólogos alertaron de vientos devastadores, "lluvias torrenciales" y una subida de la marea de entre cuatro y seis metros.
Prinsila Glaso, una miskito de 80 años, dijo a la AFP que en su comunidad al sur de Bilwi "todo está destruido" por el paso de Eta, y ante la inminente llegada de Iota, tuvo que dejar el lugar. "No he comido, no sé dónde voy a dormir aquí. Estoy muy triste", contó.