El ciclón Helene perdió intensidad este viernes, horas después de tocar tierra en Florida, en la costa sureste de Estados Unidos, y pasó de categoría 4 a 2, según el centro estadounidense de huracanes (NHC).
"El huracán Helene es ahora un huracán fuerte de categoría 2", indicó en la red social X el servicio meteorológico nacional en Tallahassee, la capital de Florida, después de que el último boletín del NHC rebajara a 175 kilómetros por hora la velocidad máxima de los vientos.
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Cuando tocó tierra, el ciclón tenía categoría 4 de un total de 5 y fue calificado de "extremadamente peligroso" por los servicios meteorológicos estadounidenses.
La tormenta alcanzó el llamado Big Bend, una región boscosa del noroeste del estado, poco antes de las 11h30 locales (03H30 GMT), indicó el NHC.
Helene llegó a la costa con vientos máximos sostenidos de 225 km/h, a proximidad de la ciudad de Perry, de unos 7.000 habitantes.
"TODA la costa del Big Bend de Florida está en riesgo de marejada ciclónica potencialmente catastrófica", alertó el NHC en redes sociales.
Los aeropuertos de Tampa y Tallahassee ya cerraron y el gobernador de Florida, Ron DeSantis, instó a los residentes a apresurar los preparativos finales antes de la llegada de la tormenta.
Cerca de un millón de viviendas y negocios se quedaron sin electricidad, indicó el sitio web PowerOutage.us, especializado en señalar apagones.