En los hospitales hay filas de horas por una vacuna. En las farmacias, corridas por un medicamento. Y en las calles, algunos hasta usan máscaras para evitar contagios: un brote de gripe H1N1 que ya mató 46 personas en Brasil este año causa temor en São Paulo, una de las mayores ciudades latinoamericanas.
En todo el país, los casos de síndrome respiratorio agudo grave (SRAG) por el virus sumaban 305 este año hasta el 19 de marzo, más del doble que los 141 de todo 2015, cuando murieron 35 personas, según datos oficiales proporcionados a BBC Mundo.
São Paulo, el estado más populoso de Brasil con unos 44 millones de habitantes,concentra el 85% de los casos registrados en 2016.
El brote surge en medio de epidemias de otros virus como el zika o el dengue, que ya desafiaban a las autoridades brasileñas cuando el país sufre una feroz crisis económica y se apresta a recibir en agosto los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro.
El ministerio brasileño de Salud pidió a la población adoptar medidas preventivas, como "evitar locales con aglomeración de personas", ante la nueva amenaza del H1N1 que según expertos estaba fuera de planes.
"Es un brote totalmente imprevisible e inesperado: nadie aguardaba que viniera tan pronto la gripe", que suele llegar "en mayo-junio y tener un tope mayor en julio-agosto", sostuvo Caio Rosenthal, un médico infectólogo en São Paulo.
"Este año tomó desprevenidas a todas las autoridades de salud", dijo Rosenthal a BBC Mundo. "Es grave porque el virus, además de ser imprevisible y variable, tiene predilecciones por personas en grupos de riesgo".
Del hospital a la misa
El H1N1 apareció en 2009 México y, con el nombre de virus de "gripe porcina", se propagó ese año por el mundo en una pandemia que se cree que a mató cientos de miles de personas.
La gripe tipo A que causa se contrae al inhalar secreciones de otros infectados cuando estornudan, tosen o hablan, o entrando en contacto con objetos contaminados por el virus.
Los síntomas suelen ser más fuertes que una gripe normal, incluyendo fiebre alta, tos y dolores de cabeza, garganta o musculares, así como falta de aire.
Rosenthal explicó que las complicaciones de SRAG suelen ser mucho más severas en personas en grupos de riesgo como diabéticos, enfermos cardíacos o con neumopatía.
El ministerio brasileño de Salud indicó que este viernes comenzaría a enviar la vacuna contra la influenza a todos los estados del país, para una campaña de vacunación prevista entre el 30 de abril y el 20 de mayo.
Lo más grave
Aunque una docena de estados de distintas regiones brasileñas han registrado casos, São Paulo presenta la situación más grave, con 38 muertes confirmadas hasta ahora en lo que va del año.
Las autoridades paulistas anticiparon para comienzos de abril la vacunación contra la gripe a sectores de la población como niños, ancianos y embarazadas, considerados más vulnerables.
Una clínica de Campinas, otra ciudad paulista, llegó a organizar un espectáculo con contadores de historias para distraer a los niños que aguardaban a ser vacunados, informó el diario O Estado de S.Paulo.
También se han reportado demoras de atención de hasta ocho horas en centros de salud para niños con síntomas de gripe.
El temor también invadió farmacias de São Paulo, donde escasea el antiviral oseltamivir recetado para tratar infecciones de H1N1, aunque su eficacia ha sido cuestionada por algunos estudios.
En las calles de la ciudad se han visto personas utilizando máscaras para evitar el contagio del virus, como ha ocurrido en otros países con brotes de H1N1.
Ante la recomendación de las autoridades de aumentar las medidas de higiene, algunas escuelas de São Paulo han alterado su rutina dando clases a los alumnos sobre cómo usar el jabón o limpiarse las uñas, informó el diario Folha de S.Paulo.
En el país con más católicos del mundo, hasta la iglesia ha tomado medidas para evitar el contagio de la gripe mediante contacto entre personas.
La diócesis de Taubaté, un municipio del estado de São Paulo, resolvió suspender las oraciones de manos tomadas y la entrega de hostias en la boca de quienes asisten a misa.
Ante una consulta de BBC Mundo, la oficina de prensa del ministerio brasileño de Salud descartó que el brote de H1N1 pueda suponer un riesgo extra para los Juegos Olímpicos de Río en agosto.
"La población ya va a estar inmunizada, entonces para los Juegos Olímpicos ese no va a ser un problema", aseguró.
Río registró el jueves su primera muerte por el H1N1, de un paciente con cuadro de neumonía que sufrió complicaciones. Al menos tres casos de infección por el virus han sido confirmados mediante exámenes de laboratorios en el estado.
