Estados Unidos indicó que le va a devolver a Japón el control de 4 mil hectáreas que son utilizadas por sus bases militares en la isla de Okinawa al sur del país.
El territorio corresponde a un 17% de lo que maneja actualmente EE.UU en el sector y es la mayor devolución desde el año 1972, cuando Japón recuperó la administración de Okinawa.
El lugar ha sido controlado por Washington desde una batalla en la que murieron 240 mil personas, durante la Segunda guerra mundial.
Las autoridades estadounidenses aún no han indicado cuando planean entregar la propiedad, que es utilizada para entrenamientos enfocados al combate en zonas de jungla por los norteamericanos.
“Una vez que las instalaciones ya no sean necesarias para defender a Japón y mantener la paz y la seguridad en el lejano Oriente, serán devueltas al Gobierno japonés” detallaron las FF.AA de EE.UU. en un comunicado entregado el pasado viernes, consigna EFE.
La devolución del territorio será posible tras la construcción de varias pistas de aterrizaje para helicópteros estadounidenses, indicó el mismo comunicado.
Okinawa alberga a más de 23 mil efectivos estadounidenses que se encuentra en Japón, así como el 74% de las instalaciones militares estadounidenses en dicho país.
La población de Okinawa y los políticos locales han manifestado su desagrado ante la presencia estadounidense en la isla, el que ha aumentado en el último tiempo debido a incidentes protagonizados por algunos militares y trabajadores norteamericanos.
Uno de los más recientes ocurrió en mayo, cuando la policía japonesa arrestó a un ex marine estadounidense que trabajaba en la base de Kadena, tras ser acusado de violar y asesinar a una joven nipona de 20 años.
