Detienen en Alemania a sospechoso del asesinato y violación de periodista búlgara
Un hombre ha sido detenido cerca de la ciudad alemana de Hamburgo como sospechoso del asesinato de la periodista búlgara Viktoria Marinova, de 30 años, según informan hoy medios de comunicación búlgaros. La periodista fue asesinada después de haber sido violada el pasado fin de semana en Ruse, en el norte del país balcánico.
La cadena Nova TV y la emisora estatal BNR coinciden en que la detención del hombre, de nacionalidad búlgara, se produjo en la localidad de Stade, a unos 45 kilómetros al oeste de Hamburgo.
Por su parte, el ministro del Interior búlgaro, Mladen Marinov, declaró hoy a la prensa en Sofía que el sospechoso –cuya madre al parecer vive en Alemania– ha sido identificado como un residente de Ruse, nacido en 1997.
Muestras de ADN coinciden
Los agentes búlgaros encontraron en la casa del sospechoso en Ruse varios objetos relacionados con la víctima, mientras que las muestras de ADN del detenido coinciden con huellas encontradas en el cuerpo de la mujer, agregó el ministro. "En este etapa no podemos decir que el asesinato está relacionado con la vida profesional de la víctima", aseguró a la prensa el fiscal general, Sotir Tsatsarov.
El fiscal aseguró que ya se han presentado cargos contra el detenido por violación con uso de fuerza y asesinato, lo que puede acarrear hasta una pena de cadena perpetua.
"Asalto espontáneo con intenciones sexuales"
Tsatsarov dijo que el detenido había bebido grandes cantidades de alcohol y que parece tratarse de un "asalto espontáneo con intenciones sexuales", y el detenido se ensañó de forma brutal con la víctima.
Tras golpearla en la nariz y en el rostro, la arrastró hasta una zona arbolada y la violó de forma "brutal y perversa", según el fiscal general. "Siguieron más golpes: el sospechoso entrenaba boxeo. El resultado de estos golpes le provocaron más traumas en el cráneo", lo que le causó la muerte, agregó Tsatsarov.
En tanto, un rumano detenido previamente en relación al asesinato fue liberado por falta de pruebas.
Marinova, de 30 años, era la presentadora de un programa de televisión por cable local. El último episodio mostró a periodistas de investigación de Rumania y Bulgaria que están investigando fraudes con fondos de la UE en Bulgaria.