Médicos piensan que respiradores podrían hacer daño a algunos pacientes de COVID-19
Un debate global ha surgido entre los médicos que lidian con casos de COVID-19: ¿Cuándo deben ser colocados en respiradores los pacientes que necesiten ayuda para respirar? Y, ¿será que la intubación puede traer más problemas que beneficios para algunas personas?
La información es poca y aún no hay estudios formales sobre el tema porque la enfermedad en sí es muy nueva.
Además es imposible saber con certeza si los pacientes a los que se les colocó respiradores habrían muerto de igual forma debido a la severidad de sus condiciones.
Pero un número creciente de doctores ha dicho que los pacientes con COVID-19 parecen desvanecerse rápidamente cuando son colocados en ventiladores o intubados.
En las últimas semanas, hospitales estadounidenses han comenzado a hacer todo lo posible para retrasar el uso de respiradores, de los que el gobierno federal ordenó unas 130.000 unidades, temiendo que escasearan.
Las primeras señales de advertencia vinieron de Italia, donde la gran mayoría de los pacientes colocados en respiradores artificiales murieron.
Las estadísticas también son malas en Reino Unido y en Nueva York, donde el 80% de los pacientes intubados murieron, según el gobernador del estado, frecuentemente tras pasar una o dos semanas en cuidados intensivos, donde fueron puestos en comas inducidos y sus músculos atrofiados.
"Aprendiendo en el camino"
Kevin Wilson, profesor de medicina de la Universidad de Boston y director de directrices en la Sociedad Torácica Estadounidense, coincidió en la necesidad de tener precauciones.
"La mayoría de la comunidad sanitaria se ha puesto un poco nerviosa con estos informes negativos sobre personas a las que no les fue bien con los respiradores, y realmente está avanzando hacia retrasar la intubación", dijo a la AFP.
"La retrasamos todo lo que podemos, pero no hasta un punto en que se convierta en una emergencia", añadió.
En lugar de usar directo los respiradores, los doctores están optando por usar métodos menos invasivos como cánulas nasales, que llevan oxígeno a través de la nariz; máscaras respiratorias convencionales o incluso colocar a los pacientes sobre sus estómagos, una posición que ayuda a los pulmones.
"Estamos aprendiendo en el camino", dijo Wilson.
Sociedades médicas, incluidos expertos internacionales de la Surviving Sepsis Campaign, están en el proceso de escribir una guía con las mejores prácticas. Pero nadie tiene aún la respuesta definitiva.