¿Cuánto cuesta vivir en las Islas Galápagos?
"Es una odisea", dice Gabriela Valenzuela, propietaria de una tienda de víveres en la isla de San Cristóbal, cuando BBC Mundo le consulta sobre los retos de abastecerla.
La isla es parte del archipiélago ecuatoriano de Galápagos, situado a 1.000 kilómetros del continente, por lo que muchos víveres y productos tienen que llegar hasta allá en barco o por vía aérea y eso encarece significativamente el costo de las mercancías.
Valenzuela, quien tiene 14 años con su pequeño comercio, dice que en ocasiones debe pagar US$800 solo en gastos de traslado.
Y no es únicamente la distancia la que incide en el precio final de los productos en el archipiélago, donde residen más de 25.000 habitantes.
"Tres barcos se han hundido desde el año pasado y prácticamente una sola embarcación está abasteciendo a las islas al momento", explica Valenzuela.
"Antes teníamos el ingreso de un barco con alimentos con una frecuencia semanal. Ahora llega cada 20 días", comenta.
Costos comparados
En ocasiones, cuando apremia que lleguen los víveres a su tienda, la mujer gestiona el envío de la mercancía por vía aérea, aunque ello encarece aún más el costo final de los productos.
BBC Mundo preguntó a Valenzuela el costo que tienen algunos productos en las islas y lo comparó con valores promedio en Quito.
Así, una botella de agua de 500ml, que en la capital cuesta US$0,25, en Galápagos tiene un valor de US$1,00. Mientras que un litro de leche pasa de US$0,80 en el continente a US$1,80 en el archipiélago.
El carguero Floreana encalló cerca de San Cristóbal en enero de este año.
Un paquete de dos kilos de arroz cuesta en Quito un promedio US$2,40, mientras que en Galápagos se vende por US$3,50
Dos kilogramos de azúcar pasan de US$1,00 a US$2,50.
El aceite de cocina, más que se duplica: de US$1,10 a US$3,00.
Lo mismo pasa con el atún enlatado y el papel higiénico, que registran importantes diferencias en su precio final ente las islas y el Ecuador continental.
"Aquí el costo de vida es demasiado exagerado", lamenta Valenzuela. Y añade: "La gente, los clientes, se quejan por los precios, y tienen razón de quejarse. Pero no depende de nosotros".
Gastos altos, salarios y nueva Ley
El costo elevado de los productos en Galápagos se siente también en sectores, como el de la construcción.
La fauna y flora únicas del archipiélago la han convertido en un importante destino turístico.
Manuel Andrade, quien junto con su familia se dedica al envío de materiales de construcción hacia las islas, dice a BBC Mundo que mientras que en el territorio continental un saco de cemento tiene un valor de US$6, 50, en el archipiélago llega a costar US$14.
Mientras que el quintal de hierro que en el continente cuesta US$48, en las islas alcanza los US$75.
Sin embargo, esos gastos elevados se enfrentan con los salarios más altos que reciben los pobladores locales.
Bajo esa lógica, hasta ahora, todo trabajador en las Islas Galápagos recibe por ley un 75% más de salario, en el caso de ser empleado privado, y un 100% adicional, si es empleado público.
Esto, sin embargo, cambiará con una nueva ley impulsada por el presidente Rafael Correa que entró en vigencia este jueves, tras ser aprobada por la Asamblea Nacional, de mayoría oficialista.
La intención de la propuesta para cambiar la ley pretende regular bajo lo que define como criterios "técnicos" y "económicos" los salarios en el archipiélago.
La nueva norma legal, entre otras cosas, establece que el valor adicional del salario se calculará con base en el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Ese índice aún está en construcción con referencia a Galápagos. Pero diversos habitantes de las islas creen que se traducirá en salarios menores a los que hasta ahora se han pagado en el archipiélago.
Paro isleño
La ley no es retroactiva, por lo que aplicará para los nuevos contratos de trabajadores radicados en las islas.
Pero la aprobación de la nueva normativa ha generado marchas de protesta en el archipiélago y la convocatoria a un paro provincial este viernes.
Las reacciones a la aprobación de la ley también incluyeron la salida de integrantes del partido de gobierno en Galápagos, así como de un asambleísta: Ángel Vilema.
El asambleísta sostiene que la ley causará que los sueldos disminuyan en Galápagos y cuestiona el que se haya aprobado la nueva forma de cálculo salarial para las islas cuando aún no existe un IPC en el archipiélago.
Las protestas en Galápagos han coincidido con una ola de protestas en varias ciudades del país, en contra de otras leyes impulsadas por Correa.
El presidente Correa insistió, a través de su cuenta en Twitter, que la nueva ley no reducirá salarios actuales de nadie pues no es retroactiva y defendió que "lo técnico es calcular el índice de precios en Galápagos y en función de eso pagar los sueldos".
Pero las protestas en las islas se han sumado a las concentraciones en contra del gobierno de Correa que se han producido desde el lunes pasado en Quito y varias ciudades de Ecuador.
Las marchas, principalmente en rechazo a la propuesta de nuevos impuestos a las herencias y a la plusvalía, así como a la conducción política del presidente Correa, han sido respondidas por grupos oficialistas que defienden la gestión gubernamental.
A cientos de kilómetros de distancia, las tensiones nacionales tienen en Galápagos un eco más local, a la espera que la nueva ley defina el verdadero costo de vivir en las llamadas "islas encantadas".