El hombre de los "hechos alternativas", el que trató de enfrentar todas las mentiras y declaraciones erróneas de Donald Trump, Sean Spicer, ha renunciado a su cargo como vocero de la Casa Blanca.
De acuerdo al New York Times, la decisión del secretario de prensa no tiene que ver con la lengua incontrolable de su jefe, sino que por la nominación del financista neoyorquino Anthony Scaramucci como nuevo director de comunicaciones.
El diario apunta que Spicer estaba "vehemente en desacuerdo" con esa determinación.
El Washington Post publica que la reacción del ahora ex portavoz tomó por sorpresa a la Casa Blanca y que es un reflejo del "caos" que ha consumido a esta administración desde que asumiera el poder hace seis meses.
El mismo medio apunta que Spicer y Scaramucci tenían una relación tensa, al igual que con el jefe de gabinete Reince Priebus.
Las razones de Trump para contratar a Scaramucci, un ejecutivo de un fondo de inversiones de 53 años, buscan recuperar la imagen pública de su gestión.
El puesto de director de comunicaciones se encontraba vacante desde mayo, cuando Michael Dubke renunció por "motivos personales".
Esta función es la encargada de diseñar la estrategia de comunicaciones de la presidencia, aunque el portavoz es el rostro visible que la aplica.
El New York Times asegura que entre los motivos que llevaron a la elección de Scaramucci se encuentran la leal defensa a la labor de Trump que ha hecho en los medios y sus buenas relaciones con periodistas de distintos sectores y medios, incluidos los que han publicado información que el presidente ha catalogado como "noticias falsas".
El nuevo director de comunicaciones es el fundados la empresa de inversiones SkyBridge Capital, que vendió a una empresa china ligada al gobierno de ese país, es un contribuidor de el canal Fox News, considerado el medio más cercano a la actual administración.