Coreanos vuelven a exigir la renuncia de la presidenta Park Geun-hye
Cientos de miles de personas abarrotaron las principales calles de Seúl, Corea del Sur, este sábado para exigir una vez más la dimisión de la presidenta Park Geun-hye, que gobierna el país desde 2013, y que se ha visto envuelta en un escándalo de corrupción después que se supiera que su amiga y confidente, Choi Soon-il, está involucrada con el ex asesor político de la mandataria, An Ching-num, quien fue acusado por abuso de poder y malversación.
Tanto el asesor político de Park como su amiga íntima habrían presionado a grandes compañías para donaran dinero a fundaciones sin fines de lucro, millones de wones que después habría ido a parar a la cuenta de Choi. Ambos deberían ser formalizados durante los próximos días.
La policía cifró en 220 mil los asistentes a las manifestaciones de este sábado, las protestas más masivas que se han dado después de la dictadura que vivió Corea del Sur hace tres décadas, las que en su momento llevaron a su fin al régimen de facto. Por su parte, los organizadores de la masiva marcha estimaron que en total fueron 850 mil las personas que salieron a protestar.
La manifestación se prolongó desde el ayuntamiento de la ciudad hasta la puerta del palacio de Gyeongbokgung, lugar desde donde se administra el país. En ese lugar los manifestantes permanecieron durante horas exigiendo la renuncia de Park, que pidió disculpas públicas por lo ocurrido y ha intentado calmar la efervescencia social y política, pero sus adversarios políticos alegan falta de sentido en sus palabras si no hay promesas específicas respecto a la transferencia de la mayor parte de su poder al nuevo integrante del gobierno.
En el mismo tono, sus opositores le han exigido a Park que renuncie a su autoridad para comandar las Fuerzas Armadas del país.
A la presidenta Park le quedan 15 meses de gobierno, si ella dimite antes de esa fecha, debe celebrarse una nueva elección en un plazo máximo de 60 días.