Según la revista Spiegel, la reacción del computador instalado en el camión fue lo que condujo a la súbita frenada que evitó más víctimas en el ataque contra los visitantes y comerciantes del mercadillo navideño de la Breitscheidplatz de Berlín.
Por otra parte, la Fiscalía Federal alemana confirmó la detención de sospechoso de haber colaborado con Anis Amri, el tunecino que perpetró el ataque en un mercado navideño de Berlín que causó 12 muertos.
El número de teléfono del arrestado, un hombre de 40 años también originario de Túnez, estaba guardado en la agenda del móvil de Amri. "Las investigaciones indican que podría estar involucrado en el ataque", añadió en un comunicado. "El terrorista le envío mensaje y foto pocos minutos antes del atentado”, cuenta Der Spiegel.
Según la revista alemana "Focus", Amri estuvo enviando mensajes de voz y fotografías hasta diez minutos antes del ataque de Berlín, posiblemente a otros islamistas. La publicación asegura, en base a fuentes de los servicios de seguridad, que el atacante envió mensajes a simpatizantes que se encontraban en Berlín y el la cuenca del Ruhr, en el oeste del país. Estas personas podrían haber estado al corriente de sus planes para atentar y entre ellos estaría el detenido de este 28 de diciembre.
¿Tenía Amri colaboradores en Italia?
Según publicó el diario italiano "La Repubblica", la tarjeta SIM que fue hallada en la mochila del abatido Amri se repartió de forma gratuita entre el 20 y el 22 de diciembre en centros comerciales de tres ciudades holandesas.
En la actualidad, el cadáver de Anis Amri se encuentra en las dependencias del instituto de medicina forense de Milán, a la espera de que concluya la autopsia. En Roma se debe determinar ahora si el arma con la disparó Amri a los policías italianos es la misma que fue utilizada para matar al conductor polaco del camión que las fuerzas de seguridad hallaron muerto a balazos en la cabina del vehículo.
Asimismo, tampoco está claro por qué Amri se escapó a Italia. Las autoridades creen que en el país trasalpino podría contar con colaboradores. Además, Italia fue el lugar al que Amri llegó en 2011 como supuesto refugiado y donde también fue condenado a cuatro años de cárcel, una pena que cumplió en diferentes prisiones.