El presunto narcotraficante peruano y cabecilla de la banda criminal Barrio King, calificado por el gobierno como "el delincuente más buscado de Perú", llegó a Lima en un avión militar, tras ser expulsado de Colombia, según informó el ministro peruano del Interior, José Luis Pérez Guadalupe. "Caracol" fue entregado por las autoridades colombianas a las peruanas en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, donde llegó escoltado por policías fuertemente armados, informó un comunicado de Migración Colombia.
De acuerdo con el ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, el detenido es señalado por la Policía peruana y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito como "el nuevo Joaquín 'El Chapo' Guzmán de Latinoamérica". Por ello, era buscado con circular roja, utilizada por la Interpol para solicitar la detención preventiva con miras a la extradición, por los delitos de homicidio, asociación a grupos armados y tráfico de drogas.
La detención fue posible gracias a una "operación secreta binacional" entre las Policías de Colombia y Perú que culminó este sábado (30.05.2016), según un comunicado de la Policía colombiana. "Felicito a nuestra Policía Nacional por esta importante captura. El Ministro del Interior del Perú, (José Luis) Pérez Guadalupe, se puso en contacto conmigo para agradecer por el trabajo de nuestra policía en la detención de este delincuente", dijo Villegas. El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, felicitó también a la policía por la captura del peruano, a quien calificó como "uno de los capos más temibles de la región".
Operación binacional
El director general de la Policía colombiana, general Jorge Hernando Nieto Rojas, se puso al frente de la operación tras regresar el pasado viernes de la XXXIII Conferencia Internacional para el Control de Drogas. Para él, la detención de "Caracol" es un "certero golpe contra el crimen transnacional", ya que implica que "ninguna nación del hemisferio será refugio de narcotraficantes".
La primera fase de la operación comenzó hace dos semanas, cuando la Policía de Perú alertó sobre el posible tránsito de "Caracol" entre Ecuador y Colombia. Efectivos de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol de la Policía colombiana (Dijin) le siguieron el rastro y constataron que el narcotraficante había entrado al país.
"Caracol" estaba viviendo en un lujoso apartamento del barrio El Poblado de Medellín, donde residía solo. Cuando tenía que realizar alguna diligencia en la calle, recurría a un ciudadano ecuatoriano, quien aparentemente lo ha acompañado en los últimos meses y le ayudó a cruzar la frontera.
Detención y traslado sin contratiempos
Según la Policía, "Caracol" se dirigió a Medellín para contactar con antiguos integrantes de la extinta "Oficina de Envigado" y estar cerca de su novia, una ciudadana venezolana que vive en esa ciudad colombiana. La localización de "Caracol" en un centro comercial del norte de Medellín fue posible debido a "estrictas labores de inteligencia" que permitieron detectar su lugar de residencia y rutina diaria, así como a sus colaboradores, agregó la información.
El director de la Policía de Perú, general Vicente Romero Fernández, se trasladó a Bogotá para liderar las acciones binacionales dirigidas a que "Caracol" llegase a su país sin contratiempos. Las autoridades peruanas acusan a "Caracol" de liderar una banda dedicada a la extorsión, el asesinato y el narcotráfico en el puerto limeño del Callao y ofrecían 500.000 soles (unos 152.000 dólares) por información que permitiese su captura. Colombia y Perú mantienen convenios de cooperación en la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y otros delitos, lo que ha permitido dar importantes golpes al crimen organizado.