El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció este sábado que el gobierno dejará de utilizar glifostato para destruir las plantaciones ilegales de coca, que procesada se convierte en cocaína.
La decisión se produce después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicara en marzo que ese herbicida es probablemente cancerígeno.
Los investigadores dijeron que la inclusión del glifosato se había tomado luego de numerosos estudios que apuntaban en ese sentido.
El glifostato se ha utilizado durante más de veinte años en los programas antinarcóticos de cultivos por aspersión patrocinados por Estados Unidos.
El presidente Santos dijo durante un acto en Bogotá que Colombia tendrá que encontrar otros mecanismos para luchar contra la producción de coca, entre ellos la erradicación manual.
Los agricultores demandaron durante años que la fumigación destruyó campos enteros de café y otros productos legales.
La suspensión se hará oficial el próximo 14 de mayo cuando se reúna el Consejo Nacional de Estupefacientes, informó la agencia Efe.
El gobierno dará de plazo hasta octubre para buscar una alternativa al uso del glifostado en la lucha contra el narcotráfico.