Un chofer de autobús fue declarado el lunes en muerte cerebral en Francia después de haber sido agredido por un grupo de personas a las que no les dejó subir a bordo porque no llevaban mascarillas, cuyo uso es obligatorio por el coronavirus.
Uno de los agresores fue detenido y los demás están fugados, indicó a la AFP una fuente policial de la ciudad de Bayona (suroeste), donde se produjo el incidente.
El grupo trató de subir al autobús el domingo por la noche sin billete ni mascarillas, cuyo uso es obligatorio en los transportes públicos en Francia. Cuando el conductor, de unos 50 años de edad, trató de impedir su entrada, recibió repetidos puñetazos, que le causaron una lesión grave en la cabeza.
Estaba inconsciente cuando lo llevaron al hospital, y los médicos le declararon en muerte cerebral el lunes.
Los servicios de autobuses de la región fueron interrumpidos el lunes después de que varios de los colegas del chofer se negaran a trabajar en protesta por el brutal ataque.