China anunció el domingo que prohibía de forma temporal el comercio de animales salvajes, como medida para frenar la epidemia de un nuevo coronavirus que supuestamente habría surgido de un mercado donde se vendía este tipo de animales para consumo.
La cría, el transporte y la venta de todas las especies de animales salvajes están prohibidas "a partir de la fecha del anuncio hasta el fin de la situación epidémica nacional", según una directiva conjunta emitida por tres agencias de alto nivel, entre ellas el ministerio de Agricultura.
Después de descubrir los primeros casos de contagio entre vendedores del mercado, el lugar fue rápidamente clausurado.
La epidemia del SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo), que mató a casi 650 personas en China a principios de los años 2000, surgió a partir de la civeta, un mamífero muy apreciado en China para la alimentación.