Las bolsas chinas vivieron este lunes por primera vez en su historia una paralización temporal de 15 minutos de su cotización, simultáneamente en Shanghai y Shenzhen, en virtud de unas nuevas normas que entraron precisamente hoy en vigor.
El indicador selectivo utilizado, el llamado índice CSI 300, que recoge el rendimiento combinado de tres centenares de firmas de ambos parqués, superó al inicio de la sesión vespertina de hoy una caída del 5 %, justo la cifra que implica, según las nuevas normas, la suspensión temporal de los mercado por 15 minutos.
Si tras esa pausa las pérdidas continúan y llegan a un 7 % en el CSI, las bolsas chinas suspenderían su cotización ya para el resto del día, por lo que cerrarían por primera vez en su historia antes de su hora de clausura diaria habitual.
Nuevas normas aumentan restricciones
Las normas por las que se ha producido esta parada son una nuevas reglas de la Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China (CRMV), destinadas a aumentar las restricciones a las fluctuaciones diarias que ya existían en los mercados chinos, con las que evitar caídas en cadena que causen desplomes como los del verano pasado.
De acuerdo con ellas, a partir de hoy, si las ganancias o pérdidas del índice CSI 300 llegan a variar un 5 %, ambas bolsas cerrarán automáticamente durante 15 minutos. Si tras esa parada la caída o el aumento continúa y llega a ser de un 7 %, o si alcanza siquiera el 5 % durante la última media hora de la sesión vespertina (las 14:30 hora local), el cierre de la sesión diaria se adelantará automáticamente a esa misma hora.