Las autoridades chinas anunciaron este jueves que detectaron el coronavirus responsable de la COVID-19 en un control rutinario de pollo importado de Brasil, primer productor mundial, y por segunda vez en gambas (camarones) procedentes de Ecuador.
El virus estaba presente en muestras tomadas el martes de alitas de pollo congeladas brasileñas, precisó en un comunicado la alcaldía de la metrópolis de Shenzhen (sur), cerca de Hong Kong.
Las autoridades aseguran que "inmediatamente" sometieron a exámenes de diagnóstico a las personas que habían estado en contacto con los productos contaminados, y a sus familiares. Todos los tests dieron negativo, según el comunicado.
La contaminación del pollo brasileño podría provocar una nueva caída de las exportaciones brasileña hacia China.
En febrero de 2019, Pekín impuso por cinco años aranceles anti-dumping al pollo brasileño que van de 17,8% a 32,4%.
Brasil, primer productor mundial de carne de pollo, era hasta 2017 el primer proveedor de China en pollo congelado, por un valor de casi 1.000 millones de dólares anuales y un volumen que representaba cerca del 85% de las importaciones del gigante asiático.
Pero en los últimos años perdió partes de mercado en favor de Tailandia, Argentina y Chile, según la consultoría especializada Zhiyan.
Más envases de camarones contaminados
Por otro lado, en la provincia de Anhui (este), la alcaldía de la ciudad de Wuhu anunció este jueves que descubrió virus en envases de gambas procedentes de Ecuador. Los paquetes estaban conservados en el congelador de un restaurante de la ciudad.
Es la segunda vez desde principios de julio que China informa de la presencia del virus en paquetes de gambas ecuatorianas.
El día 10 de ese mes, la Administración de Aduanas china realizó pruebas con muestras de un contenedor y de paquetes de camarones blancos del Pacífico que dieron positivo al nuevo coronavirus en los puertos chinos de Dalián (noreste) y Xiamen (este).
Según las últimas cifras disponibles de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Ecuador producía en 2018 unas 500.000 toneladas de camarón, de las cuales 98.000 fueron importadas a China, un mercado en plena expansión ya que en 2017 había exportado allí apenas 16.000 toneladas.
En junio, el inmenso mercado mayorista de Xinfadi, en Pekín, fue cerrado tras la aparición de un foco epidémico que afectaba a varios centenares de personas. Se detectaron restos del virus en una tabla de cortar salmón importado.
China, donde apareció el coronavirus a finales del año pasado, ha controlado en gran medida la epidemia, según los datos oficiales. El jueves, el país anunció un balance diario de 19 contagios. El último deceso causado por el virus se remonta a mediados de mayo.
En cambio, Brasil es el segundo país del mundo más castigado por la COVID-19 detrás de Estados Unidos con más 104.000 muertos y 3,16 millones de casos.
Ecuador, de su lado, tiene cerca de 6.000 muertos y más de 97.000 casos confirmados.
Las autoridades chinas anunciaron el miércoles que una mujer de 68 hospitalizada en la provincia de Hubei (centro), donde fue inicialmente detectada la COVID-19, es portadora del virus, a pesar de que se la consideró curada a principios de años.
La COVID-19 es una enfermedad respiratoria y, de momento, nada indica que se pueda transmitir por la ingestión de productos contaminados.
Han aparecido focos de contagio en mataderos de diferentes países, como Alemania, Francia, Estados Unidos o Bélgica.