Chileno fue envenenado en Argentina por su pareja: Quería cobrar una millonaria herencia
Un vuelco total tuvo la investigación de la muerte de un ciudadano chileno en la ciudad de Buenos Aires en Argentina.
Roberto Guzmán, chileno de 58 años, falleció en enero de 2020 en el país trasandino producto de una insuficiencia renal que lo mantuvo internado en un centro de salud.
Más de tres años y medio después del deceso, la Policía de Argentina detuvo al podólogo de 41 años Germán Berjeli por su presunta responsabilidad en el fallecimiento de Guzmán, con quien estaba casado.
Según publicó el diario Los Andes, Berjeli habría suministrado sustancias extrañas en el suero que recibía la víctima mientras permanecía internado. Desde entonces, el hombre se mantuvo prófugo hasta que fue ubicado y detenido en Mendoza el pasado miércoles.
El irreconocible estado en que reapareció Luis Miguel: Habría bajado más de 20 kilos
Una herencia, el motivo del crimen
El artículo precisa que la pareja se casó en septiembre de 2019 y que cuatro meses después, el chileno cayó enfermo siendo internado en un hospital, donde terminó muriendo el 12 de enero de 2020.
Posteriormente, su cónyuge retiró el cuerpo y lo cremó, mientras la familia acudió a la Justicia ante las dudas sobre la muerte de Guzmán. Fue así que las autoridades argentinas terminó allanando la casa de Berjeli, donde encontraron, entre otras cosas, bolsas con medicamentos y una receta médica a nombre de la víctima. Además, la policía recuperó cámaras de seguridad del hospital donde se veía cómo el podólogo manipulaba los sueros de su cónyuge e inyectaba en este sustancias desconocidas con una jeringa.
Luego que los exámenes post mortem arrojaron la presencia de metanol en el organismo del fallecido, la Justicia acusó a Berjelo de homicidio cuádruplemente agravado por el vínculo, la alevosía, el envenenamiento y la codicia.
Fue así que se ordenó la detención del hombre, la que ocurrió en Mendoza luego de tres años, siendo sorprendido a la salida de una casa.
El motivo del crimen corresponde a que el podólogo buscaba heredar una vivienda a nombre de Guzmán en Chile y una importante suma de dinero, lo que no pudo lograr ya que en territorio chileno no se reconoció la unión civil que ambos habían contraído en Argentina. Eso sí, Berjelo logró cobrar el seguro de vida de la víctima antes de su detención.