AFP
Altos dirigentes del chavismo celebraron este miércoles con burlas y música la renuncia del presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski, duro crítico del mandatario venezolano Nicolás Maduro, cuya asistencia a la Cumbre de las Américas había vetado.
"Comienza (la) recomposición moral de América Latina con la renuncia del fiel representante yankee y aliado sumiso" del presidente estadounidense, Donald Trump, escribió en Twitter Delcy Rodríguez, presidenta de la oficialista Asamblea Constituyente que impulsó Maduro y que rige en el país como suprapoder.
"Este nefasto personaje (...) pasará al basural de la historia. ¡Que viva Perú!", agregó Rodríguez.
El pasado 13 de febrero, el gobierno de Kuczynski advirtió que Maduro no sería "bienvenido" en la Cumbre de las Américas, prevista a celebrarse en Lima el 13 y 14 de abril.
"Yo decía que parecía que el que no iba a estar en la bendita cumbre era Kuczynski", ironizó el poderoso dirigente chavista Diosdado Cabello tras la dimisión del mandatario acosado por denuncias de corrupción.
Número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Cabello inició su programa semanal en la televisora estatal VTV con una orquesta de merengue tocando la canción "Yo no me iré".
"Hay otros que querían que nos vayamos y que ahora no pueden cantar esa canción", expresó el líder oficialista entre risas.
En la línea de Rodríguez, Cabello dijo esperar que "despierten los pueblos" de Latinoamérica tras lo sucedido en Perú, mencionando a los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos; Argentina, Mauricio Macri; y Brasil, Michel Temer.
"Así va a caer Santos, así va a caer Macri, así va a caer Temer, así van a caer todos ellos", manifestó.
Maduro no se ha pronunciado sobre la decisión de Kuczynski de dejar el cargo, pero compartió en Twitter varios mensajes de aliados e informaciones referentes a la renuncia.
El veto para que asistiera a la Cumbre de las Américas se anunció tras una reunión de cancilleres del Grupo de Lima, 14 países cuyos gobiernos lo adversan y que rechazaron la convocatoria anticipada a elecciones presidenciales en Venezuela.
Maduro aspira a ser reelegido hasta 2025 en los comicios fijados para el 20 de mayo, que la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) decidió boicotear alegando falta de garantías.