AFP
El candidato de la formación política gobernante, Benoît Hamon, eliminado en la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas con entre 6% y 7% de los votos, admitió este domingo que el Partido Socialista (PS) sufrió una "sanción histórica".
Admitiendo un "desastre", el vencedor de las primarias organizadas por los socialistas y sus aliados, asumió "la plena responsabilidad" de los resultados.
"Esta derrota es un golpe profundo, mido la sanción histórica, legítima, que han expresado contra el Partido Socialista", señaló Hamon, añadiendo que pese a estos resultados "la izquierda no está muerta"
En sus declaraciones anteriores, Hamon llamó a votar por el candidato centrista Emmanuel Macron.