AFP
Burundi expulsó el lunes a tres expertos de las Naciones Unidas que habían acusado al gobierno de Bujumbura de violaciones a los derechos humanos y advertido sobre riesgo de genocidio en razón de la escalada de violencia.
En una carta enviada por el ministro de Relaciones Exteriores, Alain Aime Nyamitwe, a la que accedió la AFP, se declara a los tres investigadores de la ONU persona non grata con efecto inmediato.
Se trata del colombiano Pablo de Greiff, el sudafricano Christof Heyns y la argelina Maya Sahli Fadel.
El portavoz de la ONU Stephane Dujarric expresó su desaprobación de la decisión de Burundi.
"Es fundamental que Burundi y todos los demás países cooperen plenamente con el mecanismo de derechos humanos de la ONU y dejen trabajar a sus representantes", señaló.
La decisión de expulsar a los expertos de la ONU se produjo tan sólo unos días después de que Burundi anunciara su retiro de la Corte Penal Internacional, asegurando que existía un "complot" para perjudicar al país.
Los tres representantes de la ONU denunciaron en un informe presentado el mes pasado "graves violaciones a lo derechos humanos cometidas en primer lugar por agentes del Estado" y personas vinculadas a ellos.
Una ola de violencia se desató en el país africano desde que en abril del año pasado el presidente Pierre Nkurunziza anunciara planes para postularse a un tercer mandato.
Más de 500 personas han muerto desde entonces, muchas de ellas en ejecuciones extrajudiciales de las que el informe de la ONU culpó a la policía, a las fuerzas de seguridad y a milicias vinculadas al partido gobernante. Por lo menos 270.000 personas abandonaron a su vez el país.
El Consejo de Seguridad de la ONU discutirá sobre la situación en Burundi el jueves, en una reunión en la que se escuchará un informe del enviado Jamal Benomar.