"Ahora los diputados han dejado claro lo que no quieren, todos debemos trabajar juntos de manera constructiva para establecer lo que sí quiere el Parlamento", resumió Theresa May. En una comparecencia frente a su residencia oficial del número 10 de Downing Street, la primer ministro británica indicó que se ha reunido esta noche con representantes del Partido Nacionalista Escocés (SNP), el Partido Liberal Demócrata y del galés Plaid Cymru.
"Por eso estoy invitando a diputados de todos los partidos a juntarnos para encontrar el camino a seguir, este es ahora el momento de dejar el interés propio a un lado", continuó. May lamentó, sin embargo, que el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, la principal formación de la oposición, haya rehusado por el momento reunirse con ella: "Nuestra puerta sigue abierta", indicó.
Un portavoz de Corbyn informó poco antes de que el líder laborista descarta mantener un diálogo "significativo" con May mientras la opción, la "amenaza", de una salida no negociada de la Unión Europea esté sobre la mesa. La jefa de Gobierno prevé continuar mañana los contactos con otros partidos para tratar de avanzar hacia un acuerdo sobre el "brexit" que pueda obtener el respaldo mayoritario de la Cámara de los Comunes.
Otros partidos de la oposición escribieron a Corbyn, después del voto de confianza que ha superado May esta tarde en el Parlamento, para exigirle que ahora respalde un segundo referéndum, algo que el Partido Laborista aceptó que debe considerarse si no puede forzar unas elecciones generales. May superó por un margen de 19 votos la moción de censura convocada precisamente por el Partido Laborista y tiene hasta el lunes para presentar a la Cámara con una propuesta alternativa del "brexit".