Bolivia cierra dividida la campaña electoral
Miles de bolivianos secundaron este jueves concentraciones contra el presidente del país, Evo Morales, en La Paz y en Cochabamba, en las que se llegó a pedir que sea procesado por traición a la patria, a diez días de las elecciones en las que concurre a la reelección. La fecha elegida fue este 10 de octubre, Día de la Democracia en Bolivia en recuerdo del fin de las dictaduras hace 37 años.
Los cabildos o asambleas ciudadanas convocados por el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) contaron con la presencia de líderes opositores, en plena campaña para los comicios del próximo 20 de octubre. Entre un mar de banderas de Bolivia y pancartas, el expresidente Carlos Mesa, candidato de Comunidad Ciudadana, se mezcló entre los concentrados y fue el más aclamado en la céntrica plaza paceña de San Francisco.
El candidato por la alianza Bolivia Dice No, Óscar Ortiz, y el líder de la también opositora Unidad Nacional, Samuel Doria Medina, se unieron también a la protesta. "Bolivia dijo no" era de las consignas más coreadas, en alusión a un referéndum que en 2016 negó la posibilidad de volverse a presentar a Evo Morales, el presidente con más tiempo en el poder en Bolivia, desde 2006.
Evo Morales en Oruro
También multitudinario fue el cierre de campaña de Evo Morales en la ciudad de Oruro. Votar a la oposición es votar "para que vuelva el FMI", clamó el candidato favorito en las encuestas, recordando el giro electoral dado a la derecha en Argentina y Ecuador. "Esta es la mejor gestión después de haberse recuperado la democracia en Bolivia", afirmó. Y concluyó que el 20 de octubre "vamos a definir si estamos con el pueblo o con el imperio, con los privatizadores o los nacionalizadores".
Los manifestantes en La Paz, sin embargo, clamaban "Evo, Linera, la cárcel los espera". Los opositores exigieron que tanto Morales como su mano derecha y candidato a vicepresidente, García Linera, sean juzgados por delitos como el de alta traición a la patria, acusados de violar el régimen constitucional de recursos naturales, sobre todo por los incendios en la Chiquitania, favorecidos por un decreto presidencial que propició quemas para obtener más terreno agrícola y ganadero. Además pidieron desconocer una posible victoria del MAS, el partido de Morales, en las elecciones.