AFP
El fabricante aeronáutico Boeing anunció este miércoles que había obtenido luz verde de Estados Unidos para vender aviones nuevos a Irán, algo inédito desde la Revolución Islámica de 1979.
Esta aprobación, que llega en forma de licencia, se refiere a un pedido estimado en 25.000 millones de dólares que la compañía Iran Air realizó al constructor estadounidense en junio.
Las dos empresas firmaron en ese momento un protocolo de acuerdo a la espera de la decisión final de las autoridades estadounidenses.
"Hemos recibido una licencia y seguimos en negociaciones con Iran Air", confirmó a la AFP Marc Sklar, portavoz del grupo de Chicago. "El acuerdo de venta final debería respetar el marco de la licencia que nos han concedido", añadió.
El acuerdo con Iran Air se refiere a 80 naves, incluyendo los modelos 737 MAX, 300ER y 900.
Si Boeing quisiera vender más de 80 aviones nuevos a Iran Air, Boeing debería solicitar otra licencia, indicó a la AFP una fuente próxima al caso.
Este pedido podría valorarse en unos 25.000 millones de dólares (unos 22.000 millones de euros), indicó en junio a la AFP una fuente cercana a las negociaciones bajo condición de anonimato. Pero la cantidad podría variar de aquí al término del contrato, ya que las compañías aéreas obtienen a menudo fuertes rebajas por parte de los constructores.
Este pedido se vio amenazado en julio pasado, cuando la Cámara de Representantes estadounidenses adoptó una serie de medidas que prohibían a las grandes instituciones financieras, principalmente norteamericanas, conceder líneas de crédito para cualquier compra de aviones comerciales que pudieran usarse con fines militares.
Para entrar en vigor, estas medidas tenían que ser aprobadas por el conjunto del Congreso.
Airbus, el gran rival europeo de Boeing, también recibió este miércoles autorización de Washington para concluir la venta de 118 aparatos a Teherán.
Los dos grupos pudieron comenzar a negociar con Irán gracias al acuerdo sobre el programa nuclear de Teherán alcanzado en 2015 con las grandes potencias occidentales, que suavizó el embargo económico contra la República Islámica.
