Bélgica: sigue la desesperada búsqueda del tercer terrorista
Con la publicación de nuevos videos donde se ve el “hombre del sombrero”, la Fiscalía de Bruselas intentó este jueves dar nuevos bríos a la búsqueda del hombre que es sindicado por los investigadores como uno de los tres que estaba implicado en el atentado contra el aeropuerto de la capital belga, donde una decena de personas perdieron la vida cuando dos terroristas se hicieron explotar.
Para acelerar las pesquisas, los fiscales pidieron directamente ayuda a la ciudadanía para dar con el sujeto. “En el marco de los atentados de Bruselas, la Fiscalía federal desea que la población colabore”, dijo el portavoz Eric van der Sypt. “Apelamos especialmente a las personas que podrían haber grabado o tomado fotografías del sospechoso. Toda información será tratada con discreción”, agregó.
Gracias a los registros de distintas cámaras de seguridad, los especialistas consiguieron reconstruir una parte del trayecto de huida del sospechoso desde el aeropuerto hacia la ciudad. En ellas se lo ve caminando y después corriendo cerca de la terminal aérea. Luego se desplaza por la cercana ciudad de Zaventem y en Bruselas, donde se dirige hacia la zona en la que se encuentran varias instituciones de la Unión Europea.
La chaqueta es central
En un momento dado de su recorrido, el sospechoso –que no pudo o no quiso hacer explotar su carga– se deshace de la chaqueta con capucha que llevaba en el aeropuerto. “Estamos especialmente interesados en la chaqueta”, afirmó otro portavoz de la fiscalía, institución que pondrá a disposición del público la orden de búsqueda, las fotografías y el video de su recorrido en la página web de la Policía Federal del Bélgica. El sujeto se deshizo de ella antes de llegar a la ciudad de Zaventem.
La Fiscalía precisa que la chaqueta de la que se deshizo por el camino es clara y tiene una capucha oscura por dentro, y alerta de que, si fuera encontrada, podría dar “información inestimable” sobre su dueño. El punto donde le grabaron las cámaras por última vez fue en un cruce de calles, a un kilómetro y unos 15 minutos a pie de la Comisión Europea (CE) y de la Gran Mezquita de Bruselas.