Tiroteo en El Paso, Texas: los padres que murieron tratando de salvar a su bebé
Jordan y Andre Anchondo se encontraban en la tienda Walmart en El Paso, EE.UU., cerca de la frontera con México, cuando un joven blanco ingresó armado con un rifle de asalto y empezó a disparar contra la gente.
Ambos fallecieron intentando proteger a su bebé de dos meses.
Gracias al escudo que formaron alrededor del niño, este sobrevivió al tiroteo masivo que dejó un saldo de al menos 20 muertos con heridas menores (fractura en dos dedos), provocadas probablemente por el peso del cuerpo de su madre al caer sobre él.
La pareja, que tenía tres niños, venía de dejar a la hija mayor en un entrenamiento, y había ido al supermercado como muchas otras familias a comprar materiales escolares para el nuevo curso escolar.
Según le contó a los medios Tito Anchondo, hermano mayor de Andre, también estaban buscando ornamentos decorativos para su nueva casa, que tenían previsto mostrar a sus familiares y amigos en una fiesta el sábado.
Fuera del hospital
La noticia del fallecimiento de Jordan se supo el mismo sábado, mientras que la muerte de Andre se confirmó el domingo.
Elizabeth Terry, tía de la joven, le dijo a CNN que cuando sacaron al bebé -Paul- de debajo de su cuerpo, el niño estaba manchado con la sangre de su madre.
Ahora, el pequeño está recuperándose en su casa de una fractura en sus dedos.
"¿Cómo es posible que los padres vayan de compras escolares para morir protegiendo a su bebé de las balas?", comentó Terry.
Según le dijo al periódico Washington Post Tito Anchondo, Andre había dejado la empresa familiar -un taller de reparación de autos- en 2018 y había establecido su propio negocio, una empresa de venta de piedra y granito para la construcción.
Jordan se dedicaba a cuidar a sus niños.
Día letal
De acuerdo con las autoridades locales, fue uno de los días más mortíferos en la historia de El Paso, una ciudad de 680.000 habitantes vecina de Ciudad Juárez, una de las localidades más peligrosas de México.
Según señaló la policía, Patrick Crusius, de 21 años, fue el único atacante y no se resistió a los oficiales al momento de ser arrestado.
Menos de 24 horas después de este incidente, se produjo otro tiroteo masivo.
Este último tuvo lugar en la ciudad de Dayton, en el estado de Ohio y dejó 9 víctimas mortales, más el tirador que fue abatido, según confirmaron las fuerzas de seguridad.