Tiroteo en Ohio: "insensible" obituario del autor del tiroteo llevó a sus padres a disculparse
El adiós de la familia del joven que mató a nueve personas el pasado 4 de agosto en Ohio, Estados Unidos, generó una gran polémica.
La familia de Connor Betts acabó pidiendo disculpas por publicar un obituario "insensible" sobre su hijo, tal y como reconocieron, en el que no se mencionó la "terrible tragedia" que provocó en la ciudad de Dayton.
Entre las víctimas de Betts, de 24 años y quien fue abatido por la policía en el momento del tiroteo, estaba su propia hermana.
El joven era un "hombre gracioso, inteligente y elocuente", destacaron en el tributo.
El texto fue publicado el pasado martes en la página web de la funeraria Conner & Koch pero fue eliminado al día siguiente, después de que la prensa estadounidense se hiciera eco de ello.
En su lugar, se publicó una disculpa de los padres de Betts, Stephen y Moira.
El suceso en Dayton ocurrió menos de 24 horas después del tiroteo masivo de El Paso, que dejó 22 muertos, convirtiéndose en uno de los más mortíferos de los últimos años en EE.UU.
"Insensibles"
Los padres de Connor Betts admitieron que fueron "insensibles al no reconocer la terrible tragedia que creó".
"En su duelo, presentaron al hijo que conocieron, lo que no disminuye de ninguna manera el horror de su última acción. Lo sentimos mucho", señala el breve comunicado publicado en la web de la funeraria.
Otro obituario de su hija de 22 años, Megan Betts, fue también publicado en esta web. Tampoco se hizo mención alguna al tiroteo.
Brian Koch, el dueño de la funeraria, confirmó que la familia había escrito esas despedidas.
"Nuestra política es ayudar a las familias que están pasando el duelo y cumplir con sus deseos", dijo a la cadena estadounidense NBC News.
Qué decía el obituario
"Un hombre gracioso, inteligente y elocuente con una sonrisa amable y unos espectaculares ojos azules. Connor Stephen Betts, de 24 años y procedente de Bellbrook, falleció el domingo 4 agosto de 2019", señalaba el obituario.
La familia añadió que Betts era un ávido lector y Boy Scout, le gustaba nadar, participó en la banda de música de su secundaria y jugaba a la Xbox, entre otras cosas que recogió la prensa estadounidense.
"Sus amigos, su familia y especialmente su buen perro Teddy le extrañarán enormemente", se podía leer en el tributo al joven.
El obituario de su hermana, por su parte, mencionaba la ambición de ésta por trabajar para la NASA para "explorar la viabilidad de vida en otros planetas".
Megan, que estaba a punto de graduarse de Ciencias de la Tierra por la Universidad Wright State el próximo diciembre, amaba la "geología, la Tierra y el espacio", según el recuerdo de su familia.
Cómo ocurrió el tiroteo
A primera hora del 4 de agosto, Betts disparó a varios viandantes en Oregon, un distrito de ocio nocturno en el centro de la ciudad de Dayton, según el relato de la policía.
Armado con un rifle de asalto y munición extra, Betts realizó 41 disparos en menos de 30 segundos mientras caminaba hacia un club llamado Ned Peppers.
Agentes que patrullaban por el área abatieron a Betts antes de que pudiera acceder al local.
La policía aseguró que podría haber ocurrido una tragedia mucho mayor si el joven hubiera conseguido entrar.
El equipo de detectives que investigó el ataque señaló que Betts tenía fascinación por los tiroteos masivos y que había expresado su deseo por cometer un tiroteo masivo.
"Estaba buscando de manera específica información que promueve la violencia", dijo el agante del FBI Todd Wickerham.