La vieja disputa entre los expresidentes Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe suma un nuevo episodio.
Esta vez el factor de la discordia es el libro que el primero presentó este martes en Madrid.
"La batalla por la paz", las memorias de Santos, de las que se conocieron fragmentos en Colombia durante el fin de semana, provocaron que Uribe asegure que quien fuera su ministro de Defensa no dice la verdad.
Otros referentes del uribismo también salieron a cuestionar al premio Nobel de la Paz usando en redes sociales la etiqueta #SantosMentiroso.
Este movimiento político, que ahora es oficialismo por la llegada de Iván Duque a la presidencia, fue muy crítico al proceso de paz emprendido por el gobierno de Santos con la exguerrilla de las FARC y que llegó a la firma del acuerdo definitivo de noviembre de 2016.
Desde que dejó la presidencia, en agosto del año pasado, el autor de "La batalla por la paz" mantuvo un perfil bajo, estuvo en EE.UU. dictando conferencias en Harvard y fueron escasas sus declaraciones a medios.
El motivo de la polémica
En uno de los pasajes del libro, se mencionan los viajes que hizo Uribe al Vaticano y a la tumba de San Francisco de Asís (Italia) en julio de 2016, en plena campaña por el plebiscito de la paz en el que finalmente se impuso el No.
Santos da a entender que las visitas de su entonces mayor opositor buscaban un pronunciamiento de los frailes del convento franciscano en contra del acuerdo con las FARC.
"Una estrategia muy creativa para deslegitimar el proceso de paz: que visitara (Uribe), en Asís, a los frailes del Convento de San Francisco -considerados los custodios de la paz, por ser los guardianes de la tumba del santo patrono de la paz-, y les explicara sus objeciones y críticas al proceso de La Habana", se lee en un capítulo de "La batalla por la paz" publicado como adelanto en el diario colombiano El Tiempo.
Santos escribe más adelante que "si Uribe lograba un pronunciamiento de ellos en contra del proceso, sería un gran golpe para su credibilidad entre los millones de católicos colombianos".
Uribe responde
La respuesta no se hizo esperar.
En una seguidilla de tuits, Álvaro Uribe negó haber buscado ninguna clase de apoyo de los franciscanos en su campaña por el No al acuerdo.
"Santos se mete también en mentiras de chismosos desocupados: hice peregrinación a Asís, con monje ninguno hablé del tema de FARC", afirmó el exmandatario.
El Centro Democrático, partido liderado por Uribe, emitió un comunicado este martes señalado que el político acudió al convento "como un peregrino más".
"Al mediodía fue invitado por los frailes a compartir el almuerzo. Ni en este fraternal encuentro, ni en otros momentos del peregrinaje, se habló del acuerdo de La Habana ni de la situación política del país. Nunca fue esa la intención de la visita a esta ciudad italiana", indica el comunicado.
El uribismo también descalifica el relato de Santos sobre la audiencia que en esos días tuvo el senador Uribe con el secretario del Estado Vaticano Pietro Parolin.
El Centro Democrático, además, califica de exitosa la audiencia que tuvo su líder político con el papa Francisco en ese año, mientras Santos en su libro la tildó de "fracaso".
Por otro lado, algunas exautoridades, como el exministro Juan Fernando Cristo, agradecieron con ironía la campaña del partido uribista por "promocionar las ventas" del libro.
Por su parte, la diputada Katherine Miranda, declarada defensora de los acuerdos con las FARC, celebró la presentación de las memorias del exmandatario.
"A lo mejor conocer lo difícil que fue lograr la paz nos hará valorarla y cuidarla más", indicó.
Planeta Libros, la casa editorial que publica "La batalla por la paz", informó a BBC Mundo que la obra será presentada en Colombia el 1º de mayo en la Feria del Libro de Bogotá, aunque es muy probable que nuevas revelaciones del libro y controversias lleguen más pronto al país.
Controversia que sigue
Pese a que Santos fue ministro de Defensa durante el gobierno de Uribe, tras la sucesión presidencial que protagonizaron en 2010 se convirtieron en rivales políticos.
Un elemento común que tienen es que ambos gobernaron Colombia durante ocho años, es decir lograron ser reelectos tras su primera gestión.
Uribe demostró su popularidad en las urnas y fue el gran protagonista en la victoria del No en el plebiscito por la paz de octubre de 2016.
Sin embargo, tras una serie de modificaciones, Santos logró su gran objetivo de firmar el armisticio con las FARC unas semanas después y fue reconocido con el Nobel de la Paz en ese año.
La implementación del acuerdo los sigue dividiendo.
Este martes, en la presentación de su libro, el autor hizo votos para que su sucesor mantenga el proceso de paz y le recordó que la Constitución le impide llevar para atrás lo firmado con las FARC.
Uribe, quien se mantiene en la política activa desde su escaño en el Congreso, mantiene su posición de revisar partes del acuerdo y aplaudió la decisión del actual presidente de objetar la ley de la justicia especial de paz, considerado parte del núcleo vital del acuerdo, hace unas semanas.