El padre de Mahsa Amini, la joven de 22 años cuya muerte tras ser detenida por la "policía de la moral" ha provocado una ola de protestas en todo Irán, acusa a las autoridades de mentir.
En una entrevista con la BBC Persa, Amjad Amini afirmó que no le han permitido ver el informe de la autopsia de su hija y negó que esta tuviera problemas de salud previamente como apuntan las autoridades iraníes.
Asimismo, indicó que testigos le dijeron a la familia que la joven fue golpeada durante la custodia policial, algo que las autoridades han negado en todo momento.
Mahsa Amini, que había acudido a visitar a su familia, fue detenida el martes 13 de septiembre a la salida de una estación de metro de Teherán por la policía religiosa islámica iraní, llamada oficialmente Gasht-e Ershad (Patrullas de Orientación). La acusaron de infringir la ley que obliga a las mujeres a cubrirse el pelo con un pañuelo, y los brazos y las piernas con ropa holgada.
La joven de etnia kurda, de la ciudad noroccidental de Saqez, en la provincia del Kurdistán, falleció el viernes en un hospital de Teherán, tras pasar tres días en coma.
Arresto
Las autoridades iraníes afirman que Amini no fue maltratada, sino que sufrió un "fallo cardíaco repentino" tras ser detenida en Teherán por la "policía de la moral" del país.
Pero su padre declaró que a su hermano de 17 años, Kiarash, que estaba allí cuando fue detenida, le dijeron que había sido golpeada.
"Mi hijo estaba con ella. Algunos testigos le dijeron a mi hijo que la golpearon en la furgoneta y en la comisaría", dijo.
"Mi hijo les rogó que no se la llevaran, pero a él también lo golpearon, le arrancaron la ropa.
"Les pedí que me enseñaran las cámaras corporales de los agentes de seguridad, pero me dijeron que las cámaras estaban sin batería", explicó.
Las autoridades iraníes dijeron que su hija llevaba ropa impúdica en el momento de su detención. Sin embargo, su padre la defendió alegando que siempre había llevado un abrigo largo.
Los médicos le impidieron ver a su hija
Amini también declaró que el personal médico le impidió repetidamente ver el cuerpo de su hija después de su muerte.
"Quería ver a mi hija, pero no me dejaron entrar", dijo.
Asimismo, afirmó que cuando solicitó ver el informe de su autopsia el médico respondió: "Escribiré lo que quiera y no tiene nada que ver con usted".
El padre de la joven fallecida declaró que no se le ha facilitado a la familia ninguna información sobre la autopsia.
Solo vio el cuerpo de su hija después de que lo envolvieran para enterrarlo, cuando solo eran visibles sus pies y su cara.
"Había moretones en sus pies", dijo. "Pedí a los médicos que le examinaran los pies".
Según Amini, las autoridades prometieron investigar la causa de las lesiones, pero no recibió respuesta alguna. "Me ignoraron. Ahora mienten".
En una declaración anterior, Mehdi Faruzesh, director general de medicina forense de la provincia de Teherán, declaró que "no se han observado signos de lesiones en la cabeza y la cara, ni hematomas alrededor de los ojos, ni fracturas en la base del cráneo de Mehsa Amini".
Las autoridades también dijeron que no había signos de lesiones internas.
Acusaciones sobre su salud
Amini también negó las afirmaciones de que su hija tenía problemas de salud que pudieran haber contribuido a su muerte.
El director general de medicina forense de la provincia de Teherán informó de que Amini había sido operada del cerebro cuando tenía 8 años.
"Están mintiendo", dijo su padre. "No ha estado en ningún hospital en los últimos 22 años, salvo por algunas enfermedades relacionadas con el frío".
"Nunca ha tenido ninguna enfermedad, nunca ha sido operada", agregó.
La BBC ha hablado con dos compañeros de la joven iraní, que dijeron que no tenían constancia alguna de hubiera sido hospitalizada con anterioridad.
Su padre también negó otra información difundida estos días sobre la salud de Amini, que indicaba que se había desmayado varias veces mientras trabajaba recientemente en una tienda, y la calificó como "falsa".
Ambición universitaria
Según su familia, Amini iba a empezar a estudiar en la universidad la próxima semana.
Su viaje a Teherán iban a ser sus últimas vacaciones antes de empezar el curso.
"Quería estudiar microbiología", indicó su padre. "Quería ser médico, un sueño que nunca se hará realidad", declaró.
"Su madre está muy enferma. Todos la echamos de menos", afirmó.
"Ayer habría cumplido 23 años", agregó.