Este martes se vivió una jornada de enfrentamientos con la policía en Quito, en el marco de las protestas iniciadas en Ecuador hace una semana contra del aumento en los precios de los combustibles, parte de las medidas fiscales y laborales del llamado "paquetazo".
Miles de personas se movilizaron en la capital ecuatoriana en la víspera de una gran marcha. El grueso de los manifestantes estuvo conformado por grupos indígenas que han llegado en las últimas horas desde todo el país.
Una parte de los manifestantes acudió a la sede de la Asamblea Nacional en Quito. Algunos lograron ingresar al recinto en donde pretendían instalar un "Parlamento popular del pueblo", dijo el líder indígena Yaku Pérez, al grito de "¡Fuera, Moreno!"
En la tribuna gritaron consignas y pretendían iniciar un diálogo entre representantes de los diferentes grupos que conformaban el contingente. En el enclave, no estaban los diputados, pues desde la semana pasada no han podido sesionar debido al bloqueo en las inmediaciones del Congreso.
En un momento, la policía llegó hasta las puertas de la Asamblea Nacional con el objetivo de desalojar a los manifestantes. Al interior había solo unos pocos, por lo que intentaron bloquear la puerta y mantener el control del edificio.
Sin embargo, las fuerzas antimotines usaron gases lacrimógenos para desalojar a los manifestantes y asegurar el control del interior y el exterior de la Asamblea Nacional, en el centro de la capital.
El enfrentamiento entre policías y manifestantes dejó varios heridos. Hasta este martes las autoridades habían reportado la detención de más de 500 personas luego de una semana de protestas, principalmente en Quito.
Finalmente, la policía despejó el exterior del edificio y los manifestantes se replegaron hacia la calle. El presidente de la Asamblea Nacional, César Litardo, dijo este martes a BBC Mundo que los legisladores estaban buscando una sede alterna para sesionar dada la falta de condiciones de seguridad en el recinto oficial.
Los enfrentamientos continuaron en las calles de Quito. Las protestas cumplen una semana este martes desde que el presidente Lenín Moreno aprobó medidas fiscales que eliminaron el subsidio gubernamental a los combustibles. Los precios de la gasolina "extra" se elevaron US$0,14 por litro.
Los manifestantes han exigido la derogación del decreto que aumenta los precios de las gasolinas. Sin embargo, el presidente Moreno dijo que no dará marcha atrás, pues considera que es una medida que saneará el déficit fiscal.
La llegada de miles de personas de todo el país a Quito responde a la convocatoria de una gran protesta en la capital para este miércoles. Ante este escenario, el presidente trasladó su gobierno a la ciudad de Guayaquil.