Hoy se celebra en todo el mundo una "huelga general por el clima". La protesta se extiende por más de 100 países. Es la antesala de la cumbre contra el cambio climático en la ONU, que comienza el lunes en Nueva York.
Antes de que las sesiones formales empiecen, ciudadanos de todo el mundo han querido enviar un contundente mensaje a los políticos: "Pónganse a trabajar". Ese ha sido uno de los lemas más repetidos. Pero la jornada ha dado para muchos más. "Bolivia se están quemando", dice la pancarta de esta asistente en Londres haciendo referencia a los incendios que hace unas semanas asolaron gran parte del país.
Liderada sobre todo por jóvenes y adolescentes preocupados por el planeta Tierra, las consignas han desbordado imaginación y colorido pero también llamados inmediatos a la acción. La jornada empezó fuerte en Australia. Miles de personas se concentraron en Melbourne, Sídney, Brisbane, Perth, Canberra o Adelaide.
Para Greenpeace, la Cumbre del Clima de la ONU solo será un éxito si un "grupo de países interviene y anuncia que va a tomar medidas vinculantes para reducir la emisiones al nivel y ritmo necesarios" para revertir la crisis climática. En la isla de Bali, en Indonesia, protestaron niños y adultos para pedir una acción urgente.
De momento, la canciller alemana, Angela Merkel, anunció este viernes un plan de choque contra el calentamiento global por importe de 54.000 millones de euros para los próximos cuatro años. En la Puerta de Brandemburgo, Berlín, tres activistas simulaban ahorcarse como metáfora del ahogo que sufre el planeta como consecuencia de las emisiones, la contaminación y el mal uso del plástico.
Con Pikachu, con pancartas de colores y con un lema contundente: "El planeta estará muerto pronto, ¡actúen ahora! Cambio de sistema, no cambio climático". Así se manifestaron los universitarios de Manila, en Filipinas.
En la reunión de Naciones Unidas, la juventud espera sobre todo la intervención de Greta Thunberg, la niña sueca que inició una huelga de colegio contra el cambio climático para conseguir llamar la atención de los medios. En Manchester, Reino Unido, miles de estudiantes abandonaron la escuela más temprano para unirse a las marchas, y muchos trabajadores también se unieron a la huelga.
El movimiento iniciado por Thunberg, conocido como "Los Viernes para el Futuro", se sumaron escolares de todo el mundo que dejaron de acudir ese día de la semana a la escuela para protestar contra el cambio climático. En los carteles vistos en Bangkok se puede leer: "Es nuestro futuro" y "Paren de negar que la Tierra está muriendo".
"¿Dónde están los árboles? ¿Qué respiraré?" La juventud de Nueva Delhi, India, también participa en las manifestaciones de cada viernes. Como no podía faltar, éste también salieron las calles.
La activista de 16 años está invitada a la sede de Naciones Unidas. Se espera que desde la tribuna proteste enérgicamente contra la falta de acción de los líderes mundiales para frenar el cambio climático. Parece existir el consenso entre la comunidad científica de que los próximos 18 meses son críticos en la lucha contra el cambio climático y otros desafíos ambientales.
Y aunque no sabemos si pronunciará su frase más famosa -"Nuestros padres discuten el final de Juego de Tronos mientras el planeta se quema"-, está presente en la marcha que atraviesa hoy las calles de Nueva York junto con representantes de 50 ONGs.
Con cánticos de "hace mucho calor, hace mucho calor para el clima", miles de personas piden a los altos cargos de la política que tomen medidas para hacer frente a la catástrofe climática. A la jornada de movilización en Europa se han sumado además unas 1.700 empresas, algunas de las cuales facilitaron a su personal que acudan a las marchas.
La agricultura, la desforestación y otros usos de la tierra son responsables de cerca del 25% de las emisiones de gases de invernadero relacionadas con la acción humana. Estos jóvenes kenianos protestaban así en Nairobi.
La extinción total de los arrecifes de coral, 10 millones de personas más expuestas a inundaciones, cada vez menos zonas aptas para el cultivo de cereales... Los escolares protestaron también en Capetown, Sudáfrica. "Digan no a la contaminación del aire", dice la pancarta de este manifestante que se dirigía al Parlamento.
Para evitar que el aumento en la temperatura del planeta supere 1,5 grados centígrados respecto a la era preindustrial, será necesario reducir las emisiones globales de dióxido de carbono en un 45% para 2030. "Hay que hacer algo ya" ha sido el urgente mensaje escuchado en las movilizaciones, incluida esta en Jakarta, Indonesia.