Por qué idea de crear una "compañía de dulces" enfrenta a los millonarios Elon Musk y Warren Buffet
¿Una marca de confitería es el nuevo proyecto de innovación de Elon Musk?
El multimillonario dijo en su cuenta de Twitter el pasado sábado que está por "lanzar una compañía de dulces" la cual será "maravillosa".
"Hablo muy, muy en serio", escribió Musk en la red social, donde tiene más de 21 millones de seguidores, muchos de los cuales reaccionaron con sorpresa y hasta emoción al preguntarse de qué se trataría esta nueva aventura de negocios.
Una empresa que se sumaría a su automotriz Tesla, a su compañía de transporte espacial SpaceX, o al servicio de pagos en línea PayPyal, entre muchos otros innovadores proyectos de Musk.
Sin embargo, la dulce noticia no es como parece, pues viene precedida de un agrio cruce de mensajes con el experimentado inversor Warren Buffett.
Ambos multimillonarios intercambiaron una serie de señalamientos en los últimos días -que algunos analistas interpretan como un "troleo" entre magnates- en los que la palabra clave es el concepto de negocios llamado "moat".
"Estoy iniciando una compañía de dulces y será maravillosa".
El "foso" de los negocios
Para entender los mensajes entre Musk y Buffett, primero es necesario comprender qué es un "moat", palabra que en inglés significa "foso".
Muchos castillos medievales tenían fosas a su alrededor que resguardaban la fortificación ante un enemigo que se aproximara a sus puertas y muros, una buena defensa para protegerse de posibles invasiones.
De manera figurada, así funcionan los moats en los negocios, un término acuñado por el propio Warren Buffet.
Una compañía tiene un "foso" económico alrededor de un negocio cuando, por ejemplo, es la única que ofrece un producto o servicio en el mercado, o su oferta es tan única que la hace muy fuerte.
Esto es tener una ventaja competitiva.
Una farmacéutica que tiene una patente registrada tiene un moat en su negocio, pues goza de un periodo en el que puede fijar el precio de un medicamento sin ninguna competencia.
Otras empresas tienen ventajas por manejar la marca que "todo el mundo" utiliza, por lo que su negocio es fuerte en su sector y eso es un moat a su favor.
"La clave para invertir no es evaluar cuánto afectará una industria a la sociedad, o cuánto crecerá, sino más bien determinar la ventaja competitiva de una empresa y, sobre todo, la durabilidad de esa ventaja", explicó Buffett sobre este concepto en 1999 en la revista Fortune.
"Los productos o servicios que tienen moats amplios y sostenibles a su alrededor son los que ofrecen recompensas a los inversores", advirtió.
El cruce de dardos
Al presentar un informe sobre los resultados de la automotriz Tesla la semana pasada, Elon Musk se refirió al concepto del moat de los negocios.
"Antes que nada, creo que los moats son una excusa", dijo ante los inversores de su compañía.
"Si tu única defensa contra los ejércitos invasores es un foso, no durarás mucho. Lo que importa es el ritmo de la innovación. Ese es el determinante fundamental de la competitividad", señaló.
La crítica al concepto de negocios que Buffet ha acuñado desde finales de la década de 1990 tuvo una respuesta del jefe de Berkshire Hathaway.
"Elon (Musk) puede atreverse con algo novedoso en algunas áreas. No creo que quiera ir tras nosotros con los dulces", señaló Buffett durante su encuentro anual con inversores de Berkshire Hathaway el sábado pasado.
"Hay algunos moats bastante buenos. Ser productor de bajo costo, por ejemplo, es un moat terriblemente importante", dijo.
Y es que Berkshire Hathaway posee la compañía de confitería See's Candies.
Buffet bromeaba con que un fuerte innovador en la tecnología como Musk no amenazaría su moat en el sector de los dulces.
¿Abrirá una fábrica de dulces?
Después de esa conferencia de Buffet llegaron los tuits de Musk, varios de ellos cargados con un tono de sarcasmo que muchos analistas del sector financiero interpretaron como un "troleo" entre magnates.
Musk pidió a sus seguidores que le sugirieran ideas para sus nuevos dulces, y deslizó un nombre: "cryptocandy", o "criptodulce", haciendo mofa del rechazo que ha expresado Buffett hacia las criptomonedas.
"Voy a construir un foso y llenarlo con dulces. ¡Warren B (Buffet) no podrá resistirse a invertir! La kryptonita de Berkshire Hathaway", escribió.
Pero luego vino una crítica más directa: "Decir que le gustan los moats es solo una buena manera de decir que le gustan los oligopolios", escribió.
Volviendo al tema este lunes, Buffett le recomendó a Musk no entrar en el negocio de los dulces, pues dijo que los consumidores son leales.
"Cuando tú vas a una tienda y dices 'Quiero un barra de Snickers' y el dueño te dice 'te doy esta otra (marca de) barra por 10 centavos menos' y no te da el Snickers, pues cruzas la calle y la consigues", señaló en entrevista con la cadena CNBC.
"Las marcas son moats (...) No creo que Elon pueda enfrentarlos", añadió.
La pregunta que sigue en el aire después de este intercambio de señalamientos es si Musk arrancará su compañía de dulces como dijo, o si solo es un troleo entre dos tiburones de los negocios como ellos.