El presidente de Argentina, Mauricio Macri, intentó este miércoles dar una vuelta de timón.
Anunció una serie de medidas económicas para tratar de contener la crisis desatada tras los resultados de las primarias del domingo -Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO)-, que, pese a no ser vinculantes, dan una idea de un triunfo de la oposición liderada por Alberto Fernández y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
"Entiendo su enojo", expresó Macri a los votantes antes de anunciar medidas que "traerán alivio a 17 millones de trabajadores y sus familias", dijo en un discurso previo a la apertura de los mercados financieros.
Entre ellas están la congelación de los precios de los combustibles durante 90 días, un recorte de impuestos a las ganancias personales y un aumento de los subsidios.
Las primarias del domingo dieron un amplio resultado al kirchnerismo, la oposición, por lo que muchos entienden que Fernández derrotará a Macri en las presidenciales del 27 de octubre.
"Sobre el resultado quiero que sepan que los entendí y respeto profundamente a los argentinos que votaron otras alternativos o nos votaron en 2015 y eligieron no acompañarnos", dijo Macri.
El resultado del domingo fue recibido con temor por los mercados, lo que generó la devaluación del peso respecto al dólar.
Con las medidas anunciadas, Macri busca recuperar la iniciativa y recuperar la confianza de los votantes de cara a las elecciones de dentro de poco más de dos meses.