Ola de frío ártico y nieve en EEUU: en Chicago hará más frío que en el Everest y la Antártica
Los estadounidenses padecerán esta semana la ola de frío más intensa "en una generación", según advierten los meteorólogos.
Estas condiciones extremas, causadas por una masa de aire helado en rotación conocida como vórtice polar, podrían traer temperaturas de hasta -53 ºC.
Se pronostica que decenas de millones de personas experimentarán temperaturas bajo cero.
Los estados de Wisconsin, Michigan e Illinois, en el medio oeste, así como Alabama y Misisipi, en el sur, normalmente más cálidos, se han declarado en emergencia.
Las autoridades del estado de Iowa han pedido a la gente que "evite respirar profundamente y que minimice las conversaciones" si salen a la calle.
Los meteorólogos pronostican que en Chicago, en el estado de Illinois, se sentirá más frío que en el Everest y en Antártica.
Esta ciudad podría experimentar una mínima de -32 ºC, con vientos helados que darían una sensación térmica de -45 ºC, según las autoridades.
"Diría que la intensidad de este aire frío es única en esta última generación", comentó John Gagan, experto del Servicio Nacional de Meteorología (NWS, por sus siglas en inglés) de EE.UU.
El NWS advierte que es posible que una persona se congele en menos de 10 minutos si sale al aire libre en circunstancias tan extremas.
Se espera que las temperaturas más frías se registren entre el martes y el jueves.
¿Calentamiento global?
Donald Trump, presidente de EE.UU., cuestiona la existencia del cambio climático y el lunes aprovechó la ola polar para recordarlo.
"En el hermoso Medio Oeste, la temperatura del viento está bajando hasta los -60, el mayor frío registrado. En los próximos días, se espera que (los termómetros) caigan aún más. La gente no puede estar afuera ni siquiera unos minutos. ¿Qué diablos está pasando con el calentamiento global? Por favor, vuelve rápido, ¡te necesitamos!", tuiteó el mandatario.
In the beautiful Midwest, windchill temperatures are reaching minus 60 degrees, the coldest ever recorded. In coming days, expected to get even colder. People can’t last outside even for minutes. What the hell is going on with Global Waming? Please come back fast, we need you!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 29 de enero de 2019
Pero la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en ingles), del propio gobierno, publicó lo que se interpretó ampliamente como una refutación al gobernante.
Winter storms don't prove that global warming isn't happening. https://t.co/LDqfq4JH9n pic.twitter.com/ndmLD637Cb
— NOAA Climate.gov (@NOAAClimate) 29 de enero de 2019
"Las tormentas de invierno no prueban que el calentamiento global no esté ocurriendo", tuiteó la NOAA el martes.
Los meteorólogos atribuyen esta corriente fría a un calentamiento repentino sobre el Polo Norte, causado por una ráfaga de aire caliente originada en Marruecos en diciembre.
Este sistema climático dividió el vórtice polar y provocó que se desplazara hacia el sur, dijo Judah Cohen, experta en tormentas de invierno de la organización Investigación Ambiental Atmosférica.
"El hecho de que el aire frío del Ártico se mueva hacia EE.UU. no quita que el planeta se esté calentando en su conjunto", explicó Derek Arndt, jefe de monitoreo climático de la NOAA en Carolina del Norte, a BBC Mundo.
De hecho, el vórtice polar "es un evento local y el medio oeste de EE.UU. ocupa una parte muy pequeña del planeta", añadió.
"Mientras experimentamos esta temporada fría en partes de EE.UU. y Canadá, el resto del planeta está caliente y si uno promedia todo, se ve que el planeta continúa calentándose", precisó Arndt.
Los principales científicos del mundo sostienen que el cambio climático es principalmente inducido por el hombre y puede llevar a inviernos más duros.
¿Qué impacto está teniendo esta temporada fría?
Más de 1.100 vuelos desde o hacia EE.UU. se cancelaron el martes, incluidos algunos a Atlanta, en el estado de Georgia, donde se jugará el Super Bowl el domingo.
En el medio oeste, miles de escuelas y empresas cerraron, al igual que varias agencias gubernamentales.
Se han abierto decenas de albergues en algunas ciudades de EE.UU.