Al menos 43 personas murieron en un ataque en el noreeste de Nigeria que su presidente describió como "demencial".
Los atacantes ataron y degollaron a las víctimas, la mayoría trabajadores agrícolas de los campos de arroz cerca de Maiduguri, la capital del estado de Borno.
Se trata de uno de los peores ataques de los últimos meses en una región donde los grupos insurgentes de Boko Haram y el Estado Islámico de África Occidental siguen activos.
Nadie se atribuyó la responsabilidad del crimen de forma inmediata.
"Condeno el asesinato de nuestros trabajadores campesinos por terroristas en el estado de Borno. Todo el país está herido por estos asesinatos sin sentido. Mis pensamientos están con sus familias en este momento de dolor. Que sus almas descansen en paz", dijo el presidente Muhammadu Buhari.
El mandatario también describió los asesinatos como "terroristas" y "demenciales", según su portavoz Garba Shehu.
"Hemos recuperado 43 cadáveres, todos ellos masacrados, junto con otros seis con heridas graves", le dijo a la agencia AFP un miliciano que ayudó a los sobrevivientes.
Según diversos reportes, más tarde se encontraron más cadáveres, pero no se supo de inmediato el número total de víctimas. Se cree que unas 15 mujeres también fueron secuestradas.
Las víctimas eran trabajadores del estado de Sokoto, en el noroeste de Nigeria, que habían viajado al noreste para encontrar trabajo, le contó otro miliciano a AFP.
El gobernador del estado de Borno, Babagana Zulum, asistió a los funerales de las víctimas este domingo.
"Es desalentador que más de 40 ciudadanos fueron masacrados mientras trabajaban en sus tierras de cultivo", le dijo a la prensa.
"Nuestra gente está en situaciones muy difíciles, están en dos condiciones extremas diferentes: por un lado, si se quedan en casa, pueden morir de hambre; por el otro, salen a sus tierras de cultivo y se arriesgan a ser asesinados por los insurgentes. Esto es muy triste".
En declaraciones al diario Premium Times, un miembro del parlamento local, Ahmed Satomi, explicó que los agricultores "fueron atacados porque el viernes habían desarmado y arrestado a un militante de Boko Haram que los había estado martirizando".
Corresponsales de la prensa dicen que los agricultores han sido atacados anteriormente por militantes del grupo islamista Boko Haram, pues sospechan que transmiten información al ejército.
El mes pasado, los combatientes de Boko Haram mataron a 22 agricultores que trabajaban en campos de riego en dos incidentes diferentes.
A pesar de los esfuerzos regionales para poner fin a la campaña de violencia de las milicias, el grupo ha intensificado sus ataques en los últimos meses.
El ejército nigeriano no ha podido sofocar la insurgencia que afecta a la región, en la que decenas de miles han sido asesinados o secuestrados en el pasado.
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