El gobierno de México expulsó este jueves al embajador de Corea del Norte, Kim Hyong Gil, como una "medida de rechazo" a las recientes pruebas nucleares realizadas por ese país.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dijo que la decisión fue adoptada por el presidente Enrique Peña Nieto, quien además declaró persona "non grata" al representante diplomático.
La expulsión se debe al incumplimiento de Corea del Norte a las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que le había prohibido desarrollar armas nucleares y misiles balísticos.
"La actividad nuclear de Corea del Norte es un grave riesgo para la paz y la seguridad internacional", señala la Cancillería en un comunicado.
"Representa una amenaza creciente para las naciones de la región, incluyendo a aliados fundamentales de México como son Japón y Corea del Sur".
El embajador Hyong Gil deberá abandonar el país antes de 72 horas. Hasta el momento no hay una respuesta oficial de la representación diplomática ni del gobierno coreano a la expulsión.
El caso Venezuela
Esta es la segunda vez en las últimas décadas que un embajador acreditado en México es obligado a salir del país.
La crisis más reciente ocurrió en 2005, cuando el entonces presidente Vicente Fox amenazó con expulsar al embajador de Venezuela, Vladimir Villegas.
El gobierno mexicano exigió una disculpa al gobierno del entonces presidente venezolano Hugo Chávez, quien acusó a Fox de ser "un cachorro del imperio".
En esa ocasión la SRE estableció un ultimátum de 24 horas antes de solicitar la salida de Villegas, pero el gobierno de Venezuela decidió retirar al diplomático antes de vencer el plazo.
Antes de ese momento la última crisis que derivó en expulsiones de funcionarios de alguna embajada ocurrió en 1971.
Esa vez fue expulsado el encargado de negocios de la representación de la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URRS).
"Quieren quedar bien"
La decisión del gobierno mexicano causó sorpresa en el país e incluso algunos analistas la calificaron como "extrema".
El politólogo Gabriel Guerra Castellanos dijo que ni siquiera en Naciones Unidas se había tomado una decisión de esta naturaleza.
"Parece que se quiere quedar bien con alguien", dijo en una entrevista radiofónica. "Ojalá en verdad quedemos bien con alguien".
La Cancillería, empero, insiste que se cumplieron las resoluciones de la ONU que son obligatorias para todos los países miembros.
"Con esta acción diplomática México expresa al gobierno de Corea del Norte absoluto rechazo a su reciente actividad nuclear", señala el comunicado.
"Significa una franca y creciente violación del derecho internacional y representa una grave amenaza para la región asiática y para el mundo".
El embajador Kim Hyong Gil tenía menos de año y medio en México, pues entregó a Peña Nieto sus cartas credenciales el 20 de junio de 2016.
Ahora deberá abandonar el país antes del domingo 10 de septiembre.