Este miércoles, el médico pakistaní Shakil Afridi se compareció ante el Tribunal Superior de Peshawar para apelar contra la sentencia que lo condenó a 33 años de prisión.
Es la primera vez que el caso de Afridi se escucha en un tribunal abierto de Pakistán.
Shakil Afridi nunca fue acusado formalmente por su papel en la operación de 2011 en la que se logró capturar y asesinar a Osama bin Laden, el hombre más buscado del mundo en ese entonces.
El doctor sostiene que se le negó un juicio justo.
Su encarcelamiento causó indignación e hizo que EE.UU. le redujera la ayuda federal a Pakistán por US$ 33 millones de dólares: un millón por cada año de prisión.
En su campaña electoral de 2016, el presidente estadounidense, Donald Trump, prometió que lograría la liberación del doctor Afridi en "dos minutos" de ser elegido, pero eso nunca sucedió.
Si bien el médico es considerado un héroe en los EE.UU., en Pakistán muchos lo ven como un traidor que trajo humillación al país.
Su papel en la operación permitió que los equipos Mar, Aire y Tierra de la Armada de los Estados Unidos (Navy Seals) pudieran travesar el espacio aéreo pakistaní, matar a la mente maestra del ataque del 11 de septiembre y escapar, llevándose su cuerpo, sin ni siquiera ser desafiados ni mucho menos detenidos por las autoridades pakistaníes.
La operación estadounidense suscitó preguntas incómodas sobre si el ejército pakistaní sabía que bin Laden estaba en el país.
Actualmente, Pakistán sigue siendo un socio difícil en la lucha dirigida por Estados Unidos contra el militantes islámicos extremistas.
¿Quién es Shakil Afridi?
Afridi era el principal médico del distrito tribal de Khyber y, siendo el jefe de servicios de salud, había supervisado varios programas de vacunación financiados por Estados Unidos.
Como empleado del gobierno pakistaní, lanzó un programa de vacunación contra la hepatitis B que incluía la ciudad de la guarnición de Abbottabad, donde Osama bin Laden vivía en medio de la presencia de militares, sin que estos se dieran cuenta.
El plan de la inteligencia estadounidense era obtener una muestra de sangre de uno de los niños residentes de un complejo residencial en Abbottabad, para determinar con ayuda de una prueba de ADN si era, o no, pariente de Bin Laden.
Se cree que un miembro del personal del doctor Afridi visitó el complejo y recolectó la sangre, lo que no se sabe es si esto fue una pieza fundamental para localizar al hombre.
Shakil Afridi fue detenido el 23 de mayo de 2011, veinte días después de la muerte de Osama bin Laden. Se cree que tenía cerca de 50 años en ese momento.
Poco se sabe sobre su vida personal, aparte de que nació en un hogar humilde y se graduó en el Khyber Medical College en 1990.
La familia de Afridi ha estado escondida por temor a ataques desde que fue arrestado.
Su esposa era directora de una escuela gubernamental antes de que se tuviera que esconder. La pareja tiene tres hijos: dos niños y una niña, dos de ellos ahora son adultos.
En enero de 2012, funcionarios estadounidenses admitieron públicamente que Afridi había trabajado para la inteligencia norteamericana.
Pero no está claro hasta qué punto él conocía su papel en la CIA. En su declaración ante la Comisión de Abbottabad no dijo nada al respecto.
Según una investigación paquistaní, Afridi no sabía quién era el objetivo de la operación cuando la CIA lo reclutó.
¿Cuáles son los delitos por los que ha sido condenado?
Aunque inicialmente se le acusó de traición, el doctor Afridi fue encarcelado en mayo de 2012 luego de haber sido declarado culpable de financiar a Lashkar-e-Islam, un grupo extremista vetado en ese entonces, y ahora extinto.
Fue sentenciado por un tribunal tribal a 33 años de prisión por presuntos vínculos con el grupo, aunque luego su condena fue reducida a 23 años.
Afridi también fue acusado de ofrecer ayuda médica de emergencia a combatientes de Lashkar-e-Islam y de permitir que el grupo celebrara reuniones en el hospital que dirigía.
Su familia ha negado vehementemente estas acusaciones y sus abogados sostienen que el único dinero que el médico le pagó al grupo fue un rescate de 1 millón de rupias paquistaníes (US$ 6.000) para asegurar su liberación después de que lo secuestraran en 2008.
En 2012 le habría confesado a Fox News desde su celda que la inteligencia paquistaní lo había secuestrado y torturado.
Un año después, logró enviarle una carta a sus abogados, en la que dice que le habían negado la justicia en tribunales.
¿Por qué no fue acusado de ayudar a EE.UU.?
Esto no está muy claro. Pero el asunto de Bin Laden fue una gran vergüenza para Pakistán.
Aunque los funcionarios pakistaníes estaban furiosos con lo que consideraron como una violación de la soberanía, sus servicios de inteligencia tuvieron que admitir públicamente que no tenían idea de que el fundador y líder de al-Qaeda había estado viviendo allí en secreto, en un edificio de tres pisos escondido por muros, durante muchos años.
El entonces jefe en materia antiterrorista de la Casa Blanca, John Brennan, dijo en ese momento que era "inconcebible que Bin Laden no tuviera un sistema de apoyo" en Pakistán, una acusación rechazada por Islamabad.
Entonces, acusar al doctor Afridi por su papel en la operación estadounidense significaría aún más mala publicidad.
¿Por qué su caso se está escuchando en los tribunales ahora?
Hasta ahora, el proceso legal se ha llevado a cabo bajo las Regulaciones de Delitos Fronterizos, heredadas de los británicos, que regían las Áreas Tribales (Fata) a lo largo de la frontera con Afganistán hasta el año pasado.
Los tribunales tribales eran presididos por funcionarios administrativos, apoyados por un consejo de tribales ancianos que no estaban obligados a seguir el debido proceso.
Eso fue visto como una forma conveniente de tratar el caso del doctor Afridi lejos del ojo público.
Pero la fusión de las áreas tribales con la provincia adyacente de Khyber Pakhtunkhwa, el año pasado, causó que los casos fueran trasladados a tribunales pakistaníes normales.
Desde que fue trasladado el año pasado de una cárcel de Peshawar a una en Punjab, se ha hablado de que Shakil Afridi podría ser liberado, posiblemente en lo que sería un intercambio de prisioneros por Aafia Siddiqui, un presunto ex miembro de al-Qaeda actualmente encarcelado en Estados Unidos.